Técnicos del Ministerio de Producción brindaron una capacitación a un grupo de productores que se beneficiarán con las obras del proyecto de aprovechamiento de agua para riego de la cuenca de los ríos Guaycurú-Iné.
La jornada se llevó adelante en la sede de la cooperativa Pampa del Indio. Estuvieron presentes representantes de la ODR de INTA, referentes de la Subsecretaría de Agricultura Familiar de la Nación, coordinadores de equipos de capacitación del proyecto y promotores asesores del programa Cambio Rural, junto a técnicos privados.
La charla estuvo a cargo del coordinador provincial del Programa Buenas Prácticas Agrícolas Roberto Gillard y fue dirigida a productores que a futuro tendrán agua disponible para riego, quienes al incrementar su producción en cantidad y calidad podrán ingresar a otros mercados, donde las exigencias en cuanto a calidad estarán presentes, por lo que hoy se hace necesario capacitarlos para que puedan hacer sus tareas diarias de mejor manera.
Estos mercados comenzarán a pedir en un futuro cercano una mínima trazabilidad de los productos que están destinados al consumo y la implementación de un protocolo de buenas prácticas, lo cual será una exigencia ineludible.
Ante esta realidad, resulta imperioso capacitar a los productores en todo lo relacionado a las buenas prácticas agrícolas, a efectos de que el mismo esté preparado cuando esto sea exigido como requisito por los consumidores a la hora de para comprar estos productos naturales.
En este encuentro participaron muchos productores que manifestaron estar convencidos sobre la necesidad de implementar los lineamientos establecidos en el programa BPA, definiéndose un cronograma de trabajo en algunos predios, lo cual recibió el reconocimiento de los presentes.
El coordinador del programa aconsejó a los productores que diversifiquen sus actividades, destacando que no se puede producir y ser eficientes realizando uno o dos cultivos como se acostumbra en la zona (melón, zapallo y sandia), porque es un mercado muy estacional y con poco volúmenes al tratarse de pequeños productores, por lo cual no son competitivos y esta es la principal barrera a la hora de la comercialización.
El ingeniero Gillard sostuvo que con agua para riego estos productores podrán realizar más cultivos, entre 10 y 12 durante el año, que los hará más competitivos y admitió que si a esto se le suma el valor agregado que se logra en el marco de Buenas Prácticas Agrícolas, el éxito será aún mayor.
