En agosto, la faena vacuna volvió a registrar un descenso, lo que genera presión alcista sobre los precios de la carne en los mostradores.
La industria frigorífica procesó un 4,4% menos de animales en relación a julio y de este modo, empieza a confirmarse un escenario de menor oferta ganadera.
Este dato se conoce en paralelo al de la inflación que en agosto trepó al 12,4%, con una fuerte incidencia de la carne.
Los datos oficiales consignaron que las subas en alimentos llegó al 15,6%, con una carne vacuna que exhibió subas que superaron el 30%.
LOS PRECIOS DE LA CARNE
Cabe recordar que tras las elecciones PASO y la devaluación dedicida por el Banco Central, las categorías de consumo en Cañuelas se dispararon y llegaron a casi $1.000 el kilo en pie, situación que tuvo un fuerte traslado a las pizarras de las carnicerías, aunque finalmente los consumidores no avalaron semejantes subas y la hacienda terminó retrocediendo.
De acuerdo al Consorcio Exportador de Carnes ABC; la faena correspondiente al octavo mes de 2023 fue de 1,23 millones de cabezas.
Si bien esta cifra marcó un retroceso con respecto a julio, cuando se extiende el análisis al período enero-agosto, las cifras son positivas: en este período, la industria procesó 9,85 millones de vacunos, un 11,5% más en la comparativa interanual.
Al medir la producción de carne, la tendencia es similar. En agosto, los frigoríficos generaron 278.700 toneladas, un 4,1% menos con respecto a julio, mientras que en los primeros ocho meses de 2023, fueron 2,23 millones de toneladas, un 8,7% superior en comparación al mismo lapso del año pasado.
EL PESO DE FAENA, OTRO PROBLEMA
Por otro lado, en el transcurso del año, el peso medio de las carcasas se ubicó por debajo de los rendimientos obtenidos en 2022, lo cual genera un problema adicional para la oferta final de carne.
En este punto, el ABC confirmó que se alcanzó un valor de 226 kilogramos durante agosto, un rendimiento resultó sensiblemente inferior, más de 10 kilos menos por carcasa, a los máximos registrados en septiembre de 2022, cuando el promedio se ubicaba en 236,3 kilos.
“La faena del mes de agosto se ha caracterizado por su descenso moderado en términos absolutos con respecto a la registrada el mes anterior; y con respecto a la faena registrada durante el mismo mes del año pasado se manifestaron caídas leves”, explicó Mario Ravettino, presidente del ABC.
Y agregó: “En agosto, con respecto a julio, se recortó la disponibilidad de todas las categorías de hacienda con excepción de los toros”.
EL NOVILLO PESADO, CON SUBAS DE HASTA 50%
Asimismo, en paralelo a esta retracción de la oferta, el costo de la hacienda faenada fue marcando una significativa tendencia a la suba, con una corrección alcista fuerte en la semana posterior a las elecciones PASO.
Esta situación también fue visible en las categorías de exportación, como el caso del novillo destinado a la Cuota Hilton, que aumentó más de un 50% en las tres primeras semanas de agosto y luego se estabilizó en torno al 32%.
“Al mismo tiempo, la corrección del tipo de cambio neto percibido por exportaciones de carne bovina apenas se deslizó en un 28% y los precios percibidos en los principales destinos de exportación mostraron valores con tendencia a la baja, con la única excepción de los cortes de alto valor destinados a la Unión Europea”, analizó Ravettino.
Para septiembre, desde el ABC proyectaron que esperan una faena con tendencia a la baja y sostenida sólo por la oferta de animales livianos provenientes de feedlots y acompañada de una oferta de vacas y novillos en sensible retroceso.
