Con el objetivo de mejorar la productividad y operatividad del puerto de San Nicolás (Buenos Aires), durante los últimos meses, se realizaron diferentes obras de dragado y mantenimiento en la terminal portuaria de esa localidad, las cuales estuvieron cargo del buque Alfonso de Albuquerque, reconocida como la draga más ecológica del mundo por ser la primera en cumplir con las normas medioambientales más estrictas, de tipo “Euro V”.
La obra significó la mejora del canal de acceso y la zona de muelle, por lo cual se removieron más de 85.000 metros cúbicos de sedimentos, equivalente a 35 piletas olímpicas de natación, garantizando los 10,05 metros de profundidad que requieren los barcos para operar.
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La presidenta del Consorcio de Gestión del Puerto de San Nicolás, Cecilia Comerio, destacó que “el dragado era una parte fundamental de nuestro diagrama de inversiones previsto para el año en curso, que implica más de 1000 millones de pesos abocados a mejorar la logística”.
Por su parte, desde la firma a cargo de los trabajos, Jan De Nul, que realizó tareas de igual envergadura en Santa Fe, San Pedro, Bahía Blanca y Quequén, subrayaron que, “esta obra contribuye de forma directa en el buen funcionamiento y competitividad de los mismos”.