La Comisión Europea (CE) aprobó la compra de la semillera estadounidense Monsanto por parte del grupo químico y farmacéutico alemán Bayer, aunque puso condiciones.
Para concretar la operación, Bayer se comprometió a vender todo su negocio de semillas y parte del de fitosanitarios a su competidora alemana BASF por 5.900 millones de euros, lo cual se anunció en octubre pasado para conseguir el visto bueno de la CE.
Lo hizo porque el órgano señaló en una investigación anterior que la fusión sin condiciones habría reducido la competencia en los mercados de semillas y pesticidas, dado que ambas empresas son rivales.
Además, Bayer le venderá a BASF su departamento de investigación y desarrollo y su negocio de caracteres vegetales, genéticamente modificados y no modificados, al tiempo que cederá sus activos del pesticida glufosinato y tres líneas de investigación en herbicidas no selectivos.
“Hemos aprobado los planes de Bayer para absorber Monsanto porque los remedios propuestos por las partes, por un valor de más de 6.000 millones de euros, responden totalmente a nuestras preocupaciones en materia de competencia”, expresó en un comunicado la comisaria europea del ramo, Margrethe Vestager.
Ahora, el organismo deberá completar la revisión de la compra por parte de BASF y, una vez aprobada, Bayer podrá completar la fusión con Monsanto.
Cabe recordar que la operación, por US$ 66.000 millones (53.724,2 millones de euros), dará lugar al mayor gigante mundial de la fabricación de semillas y fertilizantes.
