“El mercado estadounidense sigue expectante por mayores definiciones en cuanto al paquete de ayudas que la Casa Blanca lanzaría por hasta 20.000 millones de dólares para compensar a los farmers que sufrieron y sufren las consecuencias de la extendida guerra comercial entre los Estados Unidos y China que, fundamentalmente, golpeó a los productores de soja, con menores exportaciones y con el consecuente incremento de las existencias, que presionaron sobre las cotizaciones en Chicago, donde la oleaginosa tocó el menor nivel desde diciembre de 2008”, comienza el informe de Granar sobre las consecuencias de la guerra comercial que el país norteamericano sostiene con el gigante asiático, y la situación mundial consecuente en los precios de los commodities.
Y continúa: “Según los trascendidos, los pagos directos a los productores favorecerían a la soja, con una compensación de 73,48 dólares por tonelada; le seguiría el trigo, con 23,15 dólares, y, por último, el maíz, con sólo 1,57 dólar por tonelada”.
En la Argentina, el gobierno kirchnerista impuso retenciones al campo argentino. Material económico imprescindible para la caja nacional en aquel entonces. Luego, Mauricio Macri asumió en 2015 y las quitó, pero al tiempo las volvió a poner, traicionando sus propias palabras de campaña electoral. En conclusión, ningún gobierno decide apoyar/ayudar realmente al agro, sino que lo ven como una caja.
“El martes, cuando se conoció esta posibilidad, difundida por la agencia Bloomberg, los precios de la soja pasaron de subir casi 4 dólares a caer 3,60 dólares. Ese movimiento partió de la especulación de los operadores con que el ´paquete oficial´ impulse una mayor siembra de soja, en detrimento del maíz, algo que no sólo ocurriría como consecuencia del clima, que está limitando la implantación del cereal, sino que, ahora, sucedería por el ´fomento´ que otorgaría la Casa Blanca”, analiza la corredora de granos.
Entonces: “De ocurrir esto, el escenario sería muy adverso para los precios de la soja, dado que una siembra relativamente similar a la registrada durante la campaña 2018/2019 daría lugar a una oferta próxima a los 118/120 millones de toneladas que, sumada a las existencias iniciales del ciclo 2019/2020, de 27,09 millones de toneladas, darían lugar a una oferta récord de soja en los Estados Unidos. Y esto, con la vigencia de la guerra comercial, que sigue restringiendo el comercio con China, por el arancel del 25% que continúa penalizando a la mercadería estadounidense”, indica Granar.
En tanto que “ayer, a última hora, y tras el cierre adverso de los negocios en Chicago para la soja, una fuente de la Casa Blanca le dijo a la agencia Reuters que ´los agricultores deben continuar tomando sus decisiones de siembra y producción teniendo en cuenta las señales actuales del mercado, en lugar de pensar en cómo podría ser o no un programa de ayudas´, en referencia a la noticia publicada por Bloomberg”.
En conclusión: “Lo concreto es que el mercado espera una comunicación oficial para, luego, dar su veredicto en las pizarras de Chicago”, finaliza Granar.