El invierno llegó de una vez por todas, y con él, la oportunidad de disfrutar de una huerta en casa llena de verduras frescas y hierbas aromáticas que le brindan un escenario natural indiscutido.
Si bien el frío puede resultar un desafío, existen muchas opciones de cultivos y aromáticas que se adaptan perfectamente a esta época del año que además tiene una ventaja particular: las malezas crecen a un ritmo lento, reduciendo el desmalezado continuo de la huerta. Además la presencia de insectos también disminuye.
A pesar que las fechas óptimas de siembra de la mayoría de las especies que se cultivan durante el invierno son a principios del otoño, todavía se está a tiempo de iniciar el cultivo de algunas especies.
Por otro lado, para asegurar una producción constante y escalonada se debe también también hacer siembras espaciadas en el tiempo.
En tanto, es bueno aclarar que así como el crecimiento de las malezas se hace más lento a causa de las bajas temperaturas, lo mismo ocurre con los cultivos, que van a tardar tiempo hasta llegar a cosecha.
CÓMO PROTEGER LA HUERTA DEL FRÍO
“Como recomendación general hay tratar de proteger la huerta con cualquier reparo a las bajas temperaturas. Esto va a resultar beneficioso para las plantas cultivadas”, dijo el extensionista de ProHuerta del INTA, Guido Bruno.
Alguno de los cultivos aptos para sembrar en esta fecha del año son acelga, apio, arveja, brócoli, coliflor, espinaca, lechuga, puerro, ajo y habas.
Además de estas hortalizas, también se pueden incluir en la huerta de invierno verduras de raíz como remolachas, rábanos, zanahorias, repollos y cebollas de verdeo. Estas especies son excelentes opciones para cultivar en casa durante el invierno y brindarán ingredientes frescos y saludables para la cocina diaria.
LAS AROMÁTICAS TAMBIEN COMO OPCIÓN
En esta época del año, hay opciones valederas de aromáticas para vestir la huerta familiar. Estas hierbas brindarán un toque de frescura y sabor en las preparaciones culinarias. Además, suelen ser un acompañante ideal para generar diversidad en los “minisistemas”.
Algunas de ellas son ciboulette, menta, orégano, perejil, romero, tomillo, entre otras. Se trata de plantas de fácil producción, incluso en espacios reducidos como macetas, cajones, balcones, entre otros sitios.
Como recomendación general hay tratar de proteger la huerta con cualquier reparo a las bajas temperaturas. Esto va a resultar beneficioso para las plantas cultivadas”, dijo el extensionista de ProHuerta del INTA, Guido Bruno.
El cultivo de la mayoría de estas especies se inicia de plantines. “Estos pueden provenir de una multiplicación por estacas (esquejes) y es durante el invierno el momento de realizar esta práctica, aprovechando el reposo invernal para que puedan producir raíces”, aseguró el especialista a Infocampo.
En caso que ya se cuente con los plantines, sugirió “hacer el trasplante en época invernal” (para especies que soporten las bajas temperaturas del invierno), con la finalidad que, ni bien comiesen a subir las temperaturas, se reanude el crecimiento.
Vale aclarar que la mayoría de plantas aromáticas y condimentarias son bastante exigentes en relación a la luz solar. Por eso, unas 6 horas como mínimo resultan necesarias para un buen crecimiento de cada una de las especies.
Disfrutar estas aromáticas frescas resulta todavía más placentero, puesto que tener un huerto de hierbas es definitivamente una buena idea. Además, permite tenerlas frescas y siempre a mano, son fáciles de cuidar y ofrecen mucho juego en la cocina.