“Lo malo es que tuvimos 30 años malos, ya que aumentó la población y la producción sigue siendo la misma. Es decir, hubo 30 años de estancamiento en el sistema de producción de carne”.
“En este primer semestre del año, crecieron las exportaciones un 30% y el mercado interno se mantuvo en un nivel de 60 kilos por habitante”.
“Necesitamos que crezca la producción para que bajen los precios y, para eso, es indispensable un período de cuatro años con políticas estables, que es el tiempo del ciclo ganadero.”