Los cultivos intensivos demandan importantes desafíos de manejo agronómico, lo que conlleva a ser muy eficientes en la tecnología de insumos.
El tabaco, una producción regional tradicional del NOA argentino, es uno de estos casos, en el cual deben cruzarse equilibradamente procesos e insumos.
“La nutrición de tabaco es altamente dependiente del potasio, pero también de los macros, meso y micronutrientes”, explica José Gao, asesor técnico en el noroeste argentino. Segùn el referente, este nutriente otorga calidad y flexibilidad a la hoja otorgando una superadora calidad industrial.
Considerando que, para este cultivo, cada nutriente cumple un rol importante y fundamental, una de las estrategias para integrar y balancear la nutrición son las mezclas químicas, las cuales aportan las unidades justas y necesarias por gramo de fertilizante, versus lo que sucede con las mezclas físicas u otros fertilizantes genéricos.
“Luego del análisis de suelo, se practica la recomendación para aportar los kilogramos de nitrógeno, fósforo y potasio y otros nutrientes por medio de la mezcla química”, indica Gao.
En este caso, sostiene que Nitralia Elite, de la firma Amauta, es un fertilizante complejo a base de NPK que presenta varias tecnologías ventajosas para el tabaco.
SU FUNCIONAMIENTO
“El nitrógeno se libera lentamente, además el potasio está protegido para que no quede inmovilizado/adsorbido por los coloides del suelo y, a su vez, la tecnología SOP de la mezcla química mejora las condiciones para la producción de proteínas y vitaminas en la planta”, explica el asesor.
Sobre las ventajas de este producto, Gao dice que la mezcla está equilibrada y balanceada y se aplica a razón de 600 a 800 kilos por hectárea, cuya dosis varía dependiendo si hace o no reaplicación de potasio con otro fertilizante.
Al respecto, el nitrógeno de liberación lenta no interfiere en la absorción de los otros nutrientes, por tanto, cada uno de los elementos que integran la mezcla permanecen más tiempo en el suelo.
“En los resultados de ensayos, se observó que Nitralia Elite otorga superadora calidad industrial al tabaco, sin hojas manchadas ni verdes, con un color parejo antes del secado. Por tanto, la entrega de una hoja de calidad, mejora sustancialmente el precio del producto”, aclara Gao.
OTRAS TECNOLOGÌAS DISPONIBLES
El producto mencionado anteriormente puede combinarse con otros que potencian la producción y la calidad del tabaco.
Al respecto, Gao se refiere a Vigorión que es un bioestimulante formado por aminoácidos libres que intervienen en la tolerancia a estrés del tabaco y se aplica a los 30 y 45 días entre cada corte de hoja para conseguir calidad y mayor tamaño foliar, a razón de una dosis de 500 centímetros cúbicos y hasta un litro de producto por hectárea.
Otro de las soluciones de Amauta para tabaco que destaca el asesor norteño es Micro+ Plus. Se trata de un fertilizante microgranulado a base de fósforo, nitrógeno, zinc y azufre, más ácido húmicos y fúlvicos, cuya ventaja genera una forma de protección al fósforo para que el nutriente esté más tiempo disponible para la absorción radical y estimule el crecimiento de raíces.
“Para nosotros, la nutrición de los cultivos no la hace un solo nutriente, sino que se nutre de manera integral favoreciendo y acompañando la metabolización compleja de la planta. Asimismo, la ventaja de las mezclas químicas de Amauta son logísticas ya que en bajas dosis entregan una nutrición integral”, concluye Gao.