“Hay un retraso en el valor de la carne porque apuntamos demasiado al mercado interno”. Así definió la situación de la actividad ganadera actual Rodolfo Bongiovanni, especialista en agronegocios y sustentabilidad agroalimentaria e investigador del INTA Manfredi.
Lo dijo en el marco del curso sobre gestión ganadera que se realizó en la Sociedad Rural de Jesús María, donde la entidad cordobesa aprovechó para entrevistarlo.
“El productor tiene que empezar a meterse en el manejo de la empresa agropecuaria, a modo de superar la coyuntura productiva y poder planificar a mediano y largo plazo”, aseguró Bongiovanni, al tiempo que argumentó que hay que tener en cuenta una serie de indicadores claves para pensar en un plan de negocio que vuelva a convertir a la ganadería en una actividad rentable. “El Margen Bruto, por ejemplo, permite estimar el beneficio posible a corto plazo de la actividad, y evaluar el desempeño pasado de un proceso productivo”, alegó.
“Es cierto que hay un retraso en el valor de la carne, debido a que estamos apuntando demasiado al mercado interno”, sostuvo, en tanto que aseguró que la recría “sigue siendo negocio dado que es el eslabón de la cadena con números más favorables hoy en día”.
No obstante, llamó a no perder de vista el hecho de que la carne es un bien muy ligado al poder adquisitivo de los argentinos. “Al estar retraído el precio interno, una de las propuestas del plan de negocio es justamente desarrollar contratos de producción con aquellos frigoríficos que estén habilitados para exportar carne en diferentes rubros o categorías (…) Solo de esa forma, el negocio podrá ser rentable para ambas partes”, manifestó el experto.
Por último, sugirió a los productores focalizarse en el manejo de una variable económica en particular: el costo unitario por kilo producido. “Ésa es la forma que tiene el ganadero de ser más eficiente, además de estudiar cuál es el eslabón que más le conviene”, concluyó.