La ley 25.345/00 estableció en su artículo 12 que todas las plantas industriales de faenamiento de hacienda y molienda de granos tendrán la obligación de incorporar sistemas electrónicos de medición y control de la producción. En ese mismo artículo también se determinó que la Afip y la Sagpya, a través de la Oncca, serán la autoridad de aplicación de este mecanismo.
Lo que se espera es que la Procuraduría de la Nación se expida sobre la posibilidad de comprar en forma directa el prototipo de guardaganados que Invap terminó de diseñar en 2004. La empresa es una sociedad del Estado cuya totalidad del paquete accionario está en manos del gobierno de Río Negro, por lo cual no sería necesario pasar por un proceso de licitación. Si la respuesta es positiva, el Estado contrataría el servicio y se haría cargo de la instalación, cuyo costo fue valuado en $ 30 millones.
Este mecanismo permitirá el control de la cantidad y el peso de los animales y de las medias reses que producen los frigoríficos y los mataderos municipales que son cerca de 450. De esta manera el Estado pretende eliminar toda posibilidad de evasión fiscal en la industria frigorífica. La información que lean los cuentaganados será enviada a un centro de cómputos al cual tendrán acceso sólo los organismos oficiales como la Onnca, Sagpya, Afip y Senasa, que controlarán en tiempo real la producción de carne.
Si se aprueba la compra del sistema a Invap, el prototipo sería probado en un frigorífico durante 15 días. Si su funcionamiento es el correcto se aplicaría en los restantes.
La transmisión de la información sería en forma electrónica, lo que obligaría al cableado y la colocación de los correspondientes sensores en cada planta. En los frigoríficos que no tengan banda ancha, el sistema permite la transmisión de la información en forma satelital. En Invap señalaron que el sistema admite mayores complejizaciones, como la lectura de la Guía de Traslado o el DTA que admite el Senasa.
Lo que restaría definir es si el mantenimiento del sistema correrá por cuenta de Invap, en caso de que se efectúe la compra o que esta empresa gane la licitación, o por cuenta de un tercero. La instalación será por cuenta del Estado y obligatoria, con lo cual se evita que sea resistida por los frigoríficos y habilita a que, al tratarse de bienes fiscales, su mal uso pueda ser considerado un delito.