El presidente del Grupo Los Grobo, Gustavo Grobocopatel, sostuvo que “el único objetivo que tiene que tener el Gobierno es sancionar una ley justa y viable”, en referencia al proyecto enviado al Congreso en el tema semillas.
También afirmó que está de acuerdo “con muchísimos de los objetivos que tiene el Gobierno y que tiene el ministro (de Agroindustria, Ricardo) Buryaile”.
El fundador del Grupo Los Grobo, en dialogo con Télam luego de participar de un encuentro celebrado en la Universidad Di Tella, consideró que “la semilla no es solamente un vehículo de germoplasma, sino también una herramienta para transferir al campo productos microbiológicos o químicos, es decir que a la semilla la tenemos que ver no sólo como un sujeto de propiedad intelectual sino también como un facilitador de flujo de conocimientos hacia el campo”.
“Por eso hago énfasis en el uso de la semilla certificada ya que es la que permite que ese flujo se dé”, subrayó.
Respecto a las distintas iniciativas para modificar la actual Ley de Semillas, el productor se mostró escéptico ante los proyectos al sostener que “son complejos, y la ley debe ser justa y viable”.
“Para que la ley sea viable, tiene que ser simple”, agregó Grobocopatel, quien afirmó que los proyectos que están en comisión “generan determinaciones de distintos cálculos, si se paga o no se paga en función de los años”, cuestiones que para él resultan “difíciles de controlar”.
Para el productor de soja, un proyecto viable tiene que contemplar primero “que se pague la propiedad del germoplasma junto con la semilla”, por otro lado “el uso propio debe ser oneroso para todo el mundo”, y explicó que “después habrá que negociar el valor, pero que todos deben pagar por el uso propio”.
Grobocopatel señaló también que si “el proyecto que gana es justo y viable, va a haber mucha inversión de biotecnología”, dado que es un sector con “mucho para invertir y exportar, y es una industria que nos conecta con el mundo”, pero advirtió que “si el sistema no es simple va a generar confusión”.
En la actualidad, hay varios proyectos en debate en el marco de la Comisión de Agricultura de la Cámara de Diputados, uno que envió el Poder Ejecutivo, otro del diputado renovador Gilberto Alegre, iniciativas de la Federación Agraria, la Sociedad Rural y la industria semillera. En todos los proyectos menos en el de la industria, esta presente la figura del uso propio oneroso para los productores más chicos, una de las cuestiones en las que productores e industria no acuerdan.
En el contexto de implementación de la ley vigente, que data de la década del 70, “no había biotecnología, transgénicos, era otro paradigma”, dijo el dirigente empresario.
En lo referido a la resolución publicada ayer en el Boletín Oficial, que prorroga la vigencia actual del sistema de control de semillas luego de la polémica suscitada con Monsanto, Grobocopatel enfatizó que “es un sistema que es un parche que trata de reparar temas del pasado, pero que no resuelve los temas del futuro”.
“El tiempo no es neutro, y la prórroga genera confusiones e indefiniciones, hay que sancionar la ley, no hay que prorrogar nada”, puntualizó.
En cuanto a la orientación del Gobierno nacional en particular y las decisiones de la cartera agroindustrial, el representante de Los Grobo reconoció “estar de acuerdo con muchísimos de los objetivos”, sin embargo “me gustaría que las cosas sean mas rápidas”, remarcó.
“No tenemos mucho tiempo para resolver los problemas, este gobierno sabe qué es lo que hay que resolver” sostuvo Grobocopatel, a la vez que indicó que lo más urgente es “la ley de semillas, la ley de arrendamiento y sistema de comercialización de la carne”.
Por último, Grobocopatel señaló que “es peor una mala ley que una no ley” para el caso de las semillas.
