La ley de Inversión para los Bosques Cultivados fue sancionada el 16 de diciembre de 1998 y promulgada un mes más tarde por Carlos Saul Menem. Originalmente se le dió vigencia por 10 años, pero en 2008 durante el gobierno de Cristina Fernandez de Kirchner fue prorrogada por 10 años. Ahora, luego de la media sanción de diputados, el gobierno de Mauricio Macri va camino a prorrogarla por 10 años más.
La Ley 25080 de “Inversiones para Bosques Cultivados” es un sistema marco de promoción forestal que otorga estabilidad fiscal a las grandes empresas e incentivos económicos a pequeños y medianos productores. El pasado miercoles, con 188 votos afirmativos y 2 negativos, la Cámara de Diputados dió media sanción a las modificaciones y prórroga por diez años más.
“El país tiene un potencial enorme para expandir su frontera forestal, recibir inversiones en celulosa, papel, bioenergía, viviendas y generar 100 mil puestos de trabajo forestando hasta 2 millones de hectáreas hacia 2030” dijo el diputado Luis Pastori-UCR- miembro informante del proyecto.
“Actualmente en Argentina hay implantadas 1.3 millones de hectáreas, que genera una producción de rollizos de casi 15 millones de metros cúbicos. Hay 2.088 aserraderos, 20 fábricas de tableros, 5 de pasta celulósica, y 58 de papel y cartón, que da empleo a 95 mil personas de forma directa, lo que implica desarrollo regional en provincias como Misiones y Corrientes” detalló el diputado.
“Algunas modificaciones importantes son; las adecuaciones normativas vinculadas al nuevo código civil y comercial; el ordenamiento estratégico de la actividad forestal; la estabilidad fiscal por 30 años, que implica que no va haber nuevas ni mayores cargas tributarias; la devolución de créditos fiscales por la compra de bienes de capital reduciéndose de 1 año a 6 meses el plazo de reintegro; con respecto a los aportes no reintegrables, se mantiene el 80% para los emprendimientos de hasta 20 hectáreas, mientras que los porcentajes de aportes se van reduciendo a medida que crece la superficie del proyecto hasta llegar a las 300 hectáreas, con un plus para la Patagonia de hasta 500 hectáreas” agregó Pastori.
“La nueva norma aprueba un fondo especial nacional que introduce el aporte financiero del sector asegurador de vehículos automotores, que en forma voluntaria empezó a depositar el 1% del valor de cada póliza a una cuenta especial, que estará destinada a financiar esta ley, con lo cual no le va costar al Estado el pago de los aportes no reintegrables, que será aportado por el sector asegurador. Esto ya está funcionando y el año que viene se prevé una recaudación de entre 500 y 600 millones de pesos, pudiendo ser mayor” finalizó el diputado.
Desde el Ministerio de Agroindustria de la Provincia de Buenos Aires también celebraron la iniciativa, al respecto, el ministro Leonardo Sarquís dijo “Se valora especialmente porque es un sector que ahora está más organizado, con mejores estadísticas y proyecciones. Es una manera de estar más preparados para recibir nuevas inversiones”.
“Esperamos grandes impactos de esta herramienta que mejora su escenario al implementarse junto a la iniciativa del Seguro Verde que afianzará el financiamiento para el apoyo económico de la promoción, especialmente para los pequeños y medianos productores. En una actividad donde los plazos de cosecha son de 8 a 20 años. La aprobación final en Senadores marcaría un claro horizonte en la política foresto industrial de nuestro país”, sostuvo Sarquís.
Desde FAIMA-Federación Argentina de la Industria maderera y afines, celebraron la media sanción al proyecto. “La ley es un instrumento fundamental para cumplir los objetivos de Forestar 2030 y para desarrollar al sector maderero” señalaron desde la federación.