El sector frutícola atraviesa una temporada complicada. El bajo precio que recibe el productor por parte de la industria y los altos costos, en un contexto de devaluación, retenciones y baja de reintegros a la exportación, dificultan la cosecha. A este escenario, en los últimos días se sumó la aparición de carpocapsa en contenedores que iban a Brasil, lo que debilitó aún más a una actividad en plena crisis.
Es por eso que autoridades de la Federación de Productores de Fruta de Río Negro y Neuquén elevaron un pedido al ministro de Producción de la Nación, Dante Sica para que le otorgue al sector una serie de medidas para ayudar a la cosecha y no perder mercados en el exterior.
En concreto, los productores solicitaron un aporte no reintegrable de $1,50 por kilo de fruta para compensar parte del costo de cosecha (que se incrementó además por el aumento del 42% a los trabajadores), la prórroga por ley de la emergencia económica por dos años y una prórroga de los créditos Fondagro para tareas de poda y sanidad que se adjudicaron en 2017, con una financiación nueva que contemple un plazo de 3 años de gracia y 7 de devolución a tasa cero.
“El sector primario va camino a no culminar en gran parte con la totalidad de la cosecha, con mucha fruta que no se cosechará, quedando en el monte frutal. Agravando por otra parte el creciente aumento de las plagas, en especial la carpocapsa, que no solamente está al borde de perder el mercado brasilero, tan importante para nuestra región, si no que tendremos para la próxima temporada una fuerte presión de la plaga, de irreversible solución en el corto y mediano plazo”, resaltó la Federación.