En un texto lleno de referencias “maradonianas”, pero planteado hacia el mundo de la industrialización de la soja, las empresas pymes del sector señalaron por un probable “colapso hacia los próximos 100 días”.
¿El motivo del comunicado? Los empresarios le reclaman al Gobierno y los grandes jugadores del sector que “se genere de manera urgente un ámbito de discusión para el diseño de alternativas que morigeren el daño causado“.
De este modo, las Cámaras de Extrusado de Santa Fe, Buenos Aires, Entre Ríos y Córdoba plantearon que es necesario “evitar el colapso del complejo agroindustrial pyme que abastece de proteína vegetal a las cadenas agroalimentarias del interior del país”.
El Ministerio de Economía estableció dos ediciones del dólar soja.
“Hace más de 21 años se despedía el mayor ídolo deportivo y social de la Argentina, reconociendo “Yo me equivoqué y pagué, pero la pelota…la pelota no se mancha”, recordaron en alusión al recordado discurso de Diego Armando Maradona en ocasión de su partido despedida en la Bombonera.
En esa línea, no dudaron en llamar al poroto de soja como “el mayor ídolo productivo de la Argentina”.
RECLAMOS AL GOBIERNO
El comunicado lleva las firmas de Marcelo Conde (Santa Fe), Pablo Sánchez (Entre Ríos), Juan Carlos Giaccone (Córdoba) y Facundo Ferrari (Buenos Aires). Y los cuatro dirigentes no dudaron en apuntar la crítica hacia los efectos colaterales que produjeron las dos ediciones del “dólar soja”.
“En los últimos meses el Gobierno Nacional buscando cumplir con el FMI (Fondo Monetario Internacional), ideó una medida en beneficio de un exclusivo y selecto grupo multinacional de exportadores, permitiéndoles liquidar el poroto de soja anticipadamente y a un tipo de cambio diferencial”, remarcaron.
“Persiguió un estricto objetivo fiscal pero de cortísimo alcance, no se dimensionaron los enormes daños colaterales que tendría para toda la industria agroalimentaria nacional”, evaluaron.
En el sector advierten que los impactos de la medida tienen su correlato en amplias regiones del país. “Ya no es privativa de las áreas circundantes al complejo oleaginoso de Rosario, sino que a través de una vasta red de pymes agroindustriales las extrusoras de soja están al alcance de todas las cadenas agroalimentarias del país, desde Salta hasta La Pampa, desde la Precordillera hasta el Litoral”, enumeraron.
“Las producciones de leche, huevo, carne bovina, porcina, avícola y hasta ictícola, concentrados, texturizados y micronizados de soja han podido desarrollarse y alcanzar grandes productividades que las extrusoras de soja disponen en cercanía”, puntualizaron.
Por eso marcaron: “La federalización de la proteína vegetal es una necesidad de inmediata resolución”.
“Tal como el Diez reconocía que debió pagar por su error personal, pero que eso no debía afectar al conjunto del fútbol, de igual modo es momento de reconocer que hubo una equivocación y que todos pagamos con falta de granos, suba de precios, cierre de plantas, menos empleo. Pero una cosa queremos dejar en claro: la proteína de los argentinos no se toca”, parafrasearon.
