PRO Carbono es una iniciativa global de la empresa Bayer, que ofrece oportunidades a los productores dispuestos a expandir su productividad y reducir la huella de carbono, mediante su secuestro en el suelo a través de la adopción de prácticas agrícolas sustentables.
En Argentina fue lanzado en 2021 y actualmente participan 162 productores.
Durante el primer año del programa se hacen estimaciones del balance de emisiones generadas por los cultivos en el proceso productivo, teniendo en cuenta la situación inicial del lote e insumos utilizados.
Estos datos se combinan con una estimación de la fijación de carbono en función de los rindes obtenidos en cada cultivo. Los resultados se contrastarán a los tres años con el contenido de carbono resultante de los análisis de suelo.
EL APORTE DEL RIEGO A LA HUELLA DE CARBONO
En el marco del programa PRO Carbono se generaron estimaciones con resultados positivos en lotes bajo riego de pivot Valley® en campos del noroeste argentino.
Si bien es una prueba piloto, en un lote de Agropecuaria Mistol Ancho en la provincia de Catamarca se han obtenido resultados preliminares que sugieren que en los lotes bajo riego por pivot, el carbono secuestrado fue mayor al carbono liberado, lo que implicaría una remoción de gases de efecto invernadero de la atmósfera.
Cabe recordar que la producción de biomasa es el gran promotor del balance positivo de carbono en el lote. Por lo tanto, la adopción de impulsores de productividad como la genética, biotecnología de alto rendimiento y el riego por pivot, pueden colaborar a llevar a la agricultura a ser un actor clave en el secuestro de carbono y a disminuir el impacto de las emisiones globales de CO2.
“El riego ha demostrado ser un factor determinante de estos resultados preliminares. En el NOA, la escasez de precipitaciones durante los meses de invierno y primavera atenta contra la producción de biomasa”, dijo Cristian Bartolucci, Gerente de Agropecuaria Mistol Ancho.
En ese marco, explicó que la posibilidad de poder regar de manera eficiente permitió implantar gramíneas invernales de alto rendimiento, que mantienen el campo verde todo el año y elevan el contenido de materia orgánica del suelo.
“La estrategia del uso del agua que la empresa aplica para incrementar la producción de biomasa es complementar las precipitaciones en función de las necesidades en los diferentes estados fisiológicos de los cultivos”, manifestó.
ESTRATEGIA Y CRECIMIENTO
Agropecuaria Mistol Ancho instalo su primer equipo de riego Valley® hace 25 años y actualmente riega más de 3.000 hectáreas.
La estrategia de crecimiento de la empresa está basada en la incorporación de riego debido a los excelentes resultados económicos y ambientales. La empresa produce principalmente semillas híbridas de maíz, semilla de soja, trigo y legumbres.
“El riego nos está demostrando que es una herramienta útil para gestión ambiental de nuestra empresa. Lograr un balance positivo de carbono colabora con nuestra misión en sustentabilidad, pero además nos permitirá ofrecer al mercado productos y servicios carbono-neutrales“, resumió Bartolucci.