El presidente de la Sociedad Rural (SRA), Luis Etchevehere, aseguró que los productores porcinos tienen “excelentes condiciones para competir con cualquiera” y se mostró favorable a la importación de carne de cerdo de Estados Unidos, aunque con “condiciones de competitividad” que contemplen un alivio fiscal, en especial, gravámenes provinciales.
“El sector porcino argentino es de los más eficientes del mundo: en lo referido a eficiencia y productividad está en el mismo nivel que en Estados Unidos y por encima de Europa y Brasil, por lo que el trabajo es abrir los mercados pero con condiciones de competitividad”, explicó el directivo rural.
Etchevehere resaltó que, con la salvedad del reclamo impositivo, el sector está en “excelentes condiciones para competir con cualquiera” dentro y fuera del país y expresó que “aún sigue el daño por haber cerrado mercados, por lo que, partiendo de esa base, hay que hacer comercio de ida y vuelta”.
“La mayoría del mundo no es como Argentina, que tiene alimentos para abastecer y exportar, sino que produce la mitad de lo que necesita, por eso cuando tienen una reunión con Argentina se entusiasman y nos dicen que necesitan lo que producimos para que su población tenga asegurada la alimentación”, reseñó el responsable de la SRA.
En ese sentido, Etchevehere contó que las contrapartes comerciales habituales suelen expresar que “quieren comprar todo: les gusta la carne, leche en polvo, fruta, vino pero, acto seguido, preguntan qué le vamos a comprar a ellos; si uno se levanta de la mesa y sale corriendo, obviamente no va a haber comercio”.
“El desafío es poder ser competitivos, colocar productos a valor de nuestros competidores a nivel internacional en muchas góndolas del mundo para generar empleo en Argentina e importar de manera inteligente”, exhortó.
El empresario ejemplificó al respecto que “los países que hacen eso progresan, como Chile y Uruguay, que le compran carne a Paraguay y exportan también su carne, o Brasil, que importa de Australia y es uno de los principales exportadores de carne del mundo”.
“Estamos para competir porque somos muy eficientes, de los mejores productores del mundo, y hay que trabajar para que nuestros productos sigan en todas las góndolas pero también para ganar mercados porque es lo que permitirá generar empleo y combatir la pobreza en los lugares donde producimos”, enfatizó.
Etchevehere apuntó que “quedó demostrado que el sector público no puede solo y el privado tampoco; compartimos la visión (del Gobierno) de ser el supermercado del mundo y, para eso, cada uno tiene que cumplir su rol”.
“Hay que destrabar todos los impuestos disfrazados de tasas para que (la carga) no deje afuera de la cancha a un producto que es competitivo a nivel mundial y que preguntarle a los gobernadores si quieren que se genere empleo o no”, agregó en diálogo con radio Mitre.
Sobre ese punto, Etchevehere rechazó que, “por ejemplo, una granja mediana en San Antonio de Areco paga una tasa anual de higiene y seguridad 500.000 de pesos; Entre Ríos cobra ingresos brutos a la producción y todavía no adhirió a la ley pyme y muchas provincias tienen aduanas interiores: cobran por entrar y sacar productos”.
El jueves pasado, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, había anunciado la apertura del mercado argentino para la carne de cerdo de ese país, cerrado desde hace 25 años, en el marco de la visita a Buenos Aires de su vicepresidente, Mike Pence.
Las repercusiones del anuncio en el sector, con la salvedad de la SRA, fueron adversas: productores porcinos y tres de las cuatro entidades del agro rechazaron la medida “por afectar la producción local y sus riesgos sanitarios”.
Las entidades que cuestionaron la apertura el último viernes fueron la Federación Agraria, Coninagro, Confederaciones Rurales Argentinas (CRA) y la Asociación de Productores Porcinos (AAPP).