El dirigente aseguró que “las inclemencias del tiempo de los dos últimos meses es lo que rebalsó el vaso de los problemas que ya teníamos desde hace tiempo”.
En declaraciones a agencias locales, Mover explicó que la gran humedad originó que las frutas se pudran y se caigan de la planta, o que los lotes preparados para exportar se hayan deteriorado sin poder concretar los envíos.
“Hemos encontrado una gran predisposición del gobernador para ayudarnos a solucionar el problema. Quedamos en reunirnos el próximo lunes con autoridades de la Secretaría de la Producción, que se acercarán a nuestra región para evaluar las pérdidas que venimos teniendo y, a partir de allí, encontrar recursos que se adecuen al productor que no tiene posibilidad de acceder a los créditos”, comentó Mover.
Por su parte, el diputado Orlando Engelman explicó que existen 1.900 productores citrícolas en la región que padecen esta situación, por lo que la idea es encontrar una solución inmediata, “atendiendo principalmente la situación de los pequeños productores que no son sujetos de créditos”.
El diputado especificó que para quienes no accedan al crédito habrá una ayuda directa del Ejecutivo provincial, bajo una especie de contraprestación de asesoramiento técnico, que permita ir mejorando lo que se produce.
Para los productores que sí pueden acceder a un préstamo, Engelman aseguró que habrá una tasa bonificada, con un año de gracia que les permita llegar a la próxima cosecha.
Por otra parte, anunció que también surgió la idea de ir conformando un fondo, parecido al que posee la producción del tabaco, que permita ir atendiendo estas cuestiones cíclicas.
A su turno, el subsecretario de Asuntos Agrarios, Ricardo Amavet, confirmó que los créditos serán con tasa subsidiada para el caso de los productores que accedan al Banco, y mediante un fondo especial a tasas accesibles, que podría provenir del fondo de Salto Grande, para el pequeño productor que no acceda al Banco y con condiciones mucho más benignas.
