Mientras el río Uruguay no para de crecer, el ministro de Gobierno y Justicia de Entre Ríos, Mauro Urribarri y el intendente de Concordia, Enrique Cresto sobrevolaron ayer las zonas afectadas de la ciudad provincial, en un monitoreo del que también participó el jefe de la Policía, Gustavo Maslein.
“Es importante seguir de cerca la situación, observar cómo nos está afectando el ingreso del agua en algunos sectores de la ciudad, y a partir de allí tomar las decisiones que permitan paliar esta coyuntura”, expresó Urribarri, al tiempo que aseguró que “por orden del gobernador Gustavo Bordet, se está a disposición del Municipio y de los vecinos de Concordia que están sufriendo la crecida del río”.
Por su parte, Cresto consideró que “lo importante es que para la cuenca inmediata no está pronosticado lluvias para los próximos días”, lo cual trae alivio a la población, a diferencia de 2015, cuando “llovía en las tres cuencas, generando mucho caudal”.
“Estamos asistiendo a quienes están en los centros de evacuados con operativos sanitarios y todo lo que resulta necesario”, agregó, y recordó que hoy estarán en la ciudad el gobernador Bordet y el ministro del Interior, Obras Públicas y Vivienda de la Nación, Rogelio Frigerio.
Paralelamente, los funcionarios analizaron la situación de la Defensa Sur y su ampliación, en tanto que observaron el funcionamiento de la Represa de Salto Grande y los niveles del embalse aguas arriba.
Asimismo, sobrevolaron la zona en donde se relocalizaron 70 familias en el predio de Agua Patito, a las que se sumarán otras 30 familias en las próximas semanas.
“La decisión que tomamos fue convocar a la Comisión de Relocalización para poder avanzar sobre esas viviendas y dejarlas en condiciones de poder llevar este número de familias, que actualmente tuvo que ser evacuada al vivir a la vera del arroyo Manzores”, cerró Cresto.
