Mientras en Argentina los casos de robo de ganado se repiten semana tras semana, Uruguay parece repetir esa historia.
Es que en las últimas horas un caso de abigeato conmovió a la población rural del país vecino (carnearon a una vaca pero la dejaron viva, tal como se ve en la imagen), y el tema se habló entre los futuros ministros del presidente electo, Luis Lacalle Pou.
En concreto, la idea es crear una Dirección Nacional de Seguridad Rural para asegurar mayor presencia de efectivos de la policía en las zonas productivas.
La idea le pertenece a Luis Larrañaga, futuro ministro del Interior, y recibió el apoyo de Carlos María Uriarte, que se desempeñará como ministro de Ganadería, Agricultura y Pesca de Uruguay.
“Esperamos que las cosas cambien a partir del 1° de marzo [día en que asume el nuevo gobierno]. La situación que hoy tenemos en el campo es de una absoluta exposición e impunidad al mal viviente”, dijo Uriarte, al tiempo que remarcó que “hoy no hay policías en el interior”, y aseguró que las comisarías están “prácticamente vacías”.
Según Uriarte, los funcionarios del Frente Amplio que se desempeñaron hasta ahora “carecen de conocimientos prácticos, de marcas, de productores, de razas”.
Además, se refirió a la situación de quienes cometen delitos. “La mayoría de los productores del Uruguay si les piden algo para alimentar a su familia no se lo van a negar. No hay necesidad de exponerse y entrar en la misma bolsa de unos malvivientes que ni siquiera respetan el derecho de los animales“, sostuvo.
“Hoy es negocio el abigeato, es negocio robar. Es más fácil robar porque los animales y la carne valen. Es más fácil robar que trabajar”, lanzó el futuro ministro uruguayo.
Además, adelantó que aumentará las penas para quienes impulsen este tipo de delitos. “Los productores no son todos buenos, como en toda la sociedad hay gente buena y gente mala. Somos los primeros en castigarlos y tratar de que no estén como productores”, dijo.