“Este fue un nuevo año muy favorable, hubo un incremento de las ventas argentinas en un 17%, orillando los 40.000 millones de dólares, la mayoría son agroalimentos o productos derivados de los agronegocios, los productos primarios no llegan al 20% y más de un 30% son manufacturas de origen agropecuario con algún grado de elaboración o procesamiento. El sector de agroalimentos es el más competitivo o con mayor capacidad de internacionalizarse”, relató a Infocampo TV Marcelo Elizondo, director Ejecutivo de la Fundación Exportar.
“Hay también razones endógenas que explican este crecimiento, un tipo de cambio razonable y sostenible y la recuperación del crédito. También hay razones exógenas: la economía del mundo crece y la demanda de alimentos también y todo eso depara oportunidades”, agregó Elizondo.
Consultado acerca de las retenciones, el directivo de la Fundación dijo que son un gravámen que afecta las estructuras de costos de las exportaciones, pero que también hay una política del banco central de sostenimiento del tipo de cambio exportador que opera como un subsidio para el exportador, que neutraliza las retenciones. “Hay retenciones que no son muy altas, son del 5 al 10%, el Banco Central deja todavía un saldo favorable por el subsidio. De modo que si bien es cierto que hay retenciones, también hay una serie de factores adicionales que permiten sostener la competitividad desde el costo y los precios”, añadió Elizondo.
Sin embargo, desde su punto de vista, para ganar mercados en el mundo, lo importante es la competitividad basada en la calidad, la innvación, el conocimiento y la diferenciación de la oferta.
“En la Funcación le damos mucha importancia a la mejora en la capacidad de venta, nuestro país tiene buenos productos y buenos recursos humanos. Pero donde estamos poniendo más énfasis es en la estrategia de comercialización, porque es donde hay más cosas para hacer. Por ello, estamos logrando acuerdos con grandes cadenas de supermercados, tiendas departamentales y superficies comerciales en el mundo para avanzar más cerca del consumidor, sobre todo en los grandes mercados mundiales donde se consumen los productos más sofisticados. Desde el comienzo de esta década las exportaciones argentinas crecieron un 50%, especialmente en los primeros años, el gran motor fueron las manufacturas de origen agropecuario. Para 2006 esperamos que sigan aumentando las exportaciones con grandes oportunidades para los alimentos y bebidas”, concluyó.