En un campo de la localidad santafesina de Sancti Spiritu, ubicada en el extremo sur de la provincia, Nidera Semillas puso el foco en el futuro del trigo y su capacidad para expresar mayores rendimientos, uno de los aspectos por los cuales más se inclinan los productores a la hora de elegir sembrar un material.
Según se pudo observar en la jornada a campo, en la que productores, asesores y clientes de Nidera recorrieron varios ensayos de distintas variedades del cereal, la compañía buscó mostrar un equilibrio entre sanidad, rendimiento y la elección de la variedad adecuada para las condiciones que ofrece cada ambiente, ya que resultan claves a la hora de alcanzar el éxito.
“Somos mejoradores y obtenemos ganancia genética que trasladamos principalmente al rendimiento. El productor, en primer lugar, busca un material que sea rendidor. Pero además, nuestras variedades ponen el foco en otros puntos como la calidad y el comportamiento sanitario”, sostuvo en diálogo con Infocampo, el especialista en desarrollo de productos y extensión de Nidera, para la zona centro, Ricardo Ollúa.
Cabe destacar que desde siempre, los trigos de Nidera han roto el molde. Caracterizados por su gran potencial de rendimiento, destacada sanidad y adaptación a distintos ambientes productivos, la firma amplia año tras año su portfolio, buscando cubrir las necesidades de los productores.
TRES NUEVAS VARIEDADES DE TRIGO
La campaña triguera actual se muestra en un punto concluyente, con resultados dispares, pero mayormente atravesando un buen estado general en el centro del país.
Sin embargo, Nidera ya piensa en el ciclo productivo que viene, con la presentación de tres materiales que impulsan una siembra de lujo. “Hay tres nuevas variedades que saldrán al mercado en 2024. Con ellas buscamos completar los ejes que necesitan los productores para ser más eficientes”, indicó el entrevistado.
“Somos mejoradores y obtenemos ganancia genética que trasladamos principalmente al rendimiento. El productor, en primer lugar, busca un material que sea rendidor. Pero además, nuestras variedades ponen el foco en otros puntos como la calidad y el comportamiento sanitario”, sostuvo en diálogo con Infocampo, el especialista en desarrollo de productos y extensión de Nidera, para la zona centro, Ricardo Ollúa.
En ese marco, informó la incorporación de Baguette 525, de altísima performance dentro de las variedades de ciclos cortos, que supera en un 8% de rinde al Baguette 550, que tiene varios años de rodaje en el campo.
Por otra parte, se lanzó el varietal Baguette 610, superando al Baguette 620, no solamente en rendimiento, sino también en aspecto sanitario, sobretodo porque tiene una una baja susceptibilidad a roya estriada.
Por último, completó el trío de variedades nuevas, un material de calidad 1, Baguette 460, que viene a mejorar en rendimiento al tradicional Baguette 450. Se trata de un trigo con muy buen perfil en términos de proteína, gluten y excelente peso Hectolítrico.
UNA CAMPAÑA DESAFIANTE
Según el especialista de Nidera, las tres temporadas de sequía, sobre todo la última, fueron muy desafiantes para los desarrolladores.
“Venimos de campañas climáticamente muy secas, la última fue un poquito más cálida, en términos de acumulación de horas de frío, que pudimos leer versus la 2022. No hay dudas que fue muy desafiante, porque con pocos recursos tuvimos que tratar de generar el máximo rendimiento posible”, manifestó Ollúa
Sin embargo, se mostró conforme por el comportamiento de sus materiales a pesar del clima. “A pesar de todo, logramos cumplir las expectativas en el campo. Si bien no nos ayudó demasiado en términos de número de granos por metro cuadrado, vemos que el peso de mil es mayor, con lo cual podremos equipararnos en el rendimiento final”, dijo.
Por otra parte insistió, en que desde el punto de vista genético, en el marco de una campaña “seca” de semillas, se buscará equilibrar las cuestiones de rendimiento con aspectos como perfiles sanitarios, altura de planta, fenotipo, calidad, entre otros.
No obstante, Nidera cuenta con una amplia paleta de variedades y el conocimiento del ambiente puesto a disposición de la elección del material y del productor. “Es por ahí donde se esconde un gran porcentaje del éxito”, destacó el ingeniero agrónomo.