Semanas atrás finalmente se dio a conocer el número de terneros y terneras en stock al 31 de diciembre del año pasado: oficialmente, la disponibilidad de terneros a inicios del ciclo era de 14.457.553 animales. Es decir, unos 150.000 más, pero 500.000 animales menos que en el 2019.
De acuerdo al último análisis del Rosgan (Rosario Ganadero), de la Bolsa de Comercio de Rosario, esta menor restricción de oferta se suma a una creciente retención de invernada en los campos, que se viene marcado en los últimos años.
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De las 14.457.553 cabezas, dice el análisis, solo 21% de esa invernada salió de los campos con destino a engorde, mientras que el resto permanece en sistemas de recría pastoril, esto puede ser en manos del mismo criador, o bien, de otros invernados. Esto representa un valor menor respecto a los 22,4% que arrojaba el 2021 o 23,4% del 2020.
Considerando que el criador actualmente se encuentra en una mejor posición financiera, dado por la mejor relación de engorde, también hay una fuerte aversión a quedarse en pesos y, por ende, el ternero es un resguardo de valor. También, y cierto, agrega el trabajo del Rosgan, es que el valor del
ternero medido en pesos constantes, se encuentra en los niveles más elevados desde 2016.
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El informe cita que, si bien abril ha sido un mes donde se ha visto mucha más oferta de terneros que en marzo, en lo que va del año la oferta total de terneros sigue siendo escasa, como también así la calidad de la invernada ofrecida ya que mucho de los animales provienen desde el norte del país.
De esta forma, en conclusión, aun en plena zafra los valores se mantienen sostenidos y, en tanto los feedlots conserven esta ligera mejora conseguida en los márgenes de engorde tras el ajuste del gordo, el ternero de invernada seguirá siendo la categoría más demandada.
