En el primer trimestre de 2015 la división lechera de Cresud –localizada en el tambo “El Tigre” de Trenel, La Pampa– registró una pérdida neta de 1,70 millones de pesos versus un resultado positivo de 900.000 pesos en el mismo período de 2014, según publica valorsoja.com.
Si bien la ganancia bruta de la unidad lechera fue de 700.000 pesos en el período, el incremento de los costos operativos (gastos de estructura) provocó un resultado neto negativo.
La actividad lechera, debido al subsidio indirecto del maíz, es actualmente una de las actividades agropecuarias menos castigadas por la política anti-campo del gobierno kirchnerista. Pero los gastos de estructura, en el actual contexto cuasi-híperinflacionario, son una carga pesadísima para el sector privado (con un peso proporcional al tamaño de las empresas).
En los tres primeros meses de este año Cresud informó a la Comisión Nacional de Valores que “El Tigre” contó con 2222 vacas en ordeñe que en promedio produjeron 21 litros diarios, mientras que en el mismo período de 2014 la empresa había tenido 2631 vacas en ordeñe con una productividad individual de 20 litros.
En el acumulado de los últimos tres trimestre (julio de 2015 a marzo de 2015) el tambo de Cresud aún conserva una rentabilidad neta positiva de 3,9 millones de pesos debido a la buena performance registrada el año pasado.
Cresud además informó que al 31 de marzo pasado redujo en un 14% de su stock bovino de cría al declarar 53.958 cabezas versus 62.484 animales en la misma fecha de 2014. Pero aumentó en un 123% las existencias de invernada (que quedaron en 11.022 cabezas contra 4799 al 31 de marzo de 2014).