Este martes, una noticia surgida del Mercado de hacienda de Liniers resonó muy fuerte entre productores, consignatarios y consumidores.
La cadena de supermercados Coto había sido suspendida transitoriamente entre los agentes del centro concentrador por la compra de un lote de novillitos de 400 kilos a 198 pesos por kilo vivo. De acuerdo a las versiones, la orden había partido, directamente, desde la Secretaría de Comercio Interior.
Justamente, a casi 48 horas de lo ocurrido, un comunicado firmado por el directorio de la cadena de supermercados “desmiente” las versiones y dice que la marca está operando con normalidad.
El propio Alfredo Coto, fundador de marca, salió al cruce de lo ocurrido y dice que sigue operando en Liniers como lo hace desde hace 50 años.