A través de su programa Tambos y Producción Primaria de Leche, el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) brinda a los productores tamberos algunas recomendaciones relacionadas con la higiene durante la rutina de ordeño, a fin de producir leche de composición, cantidad y calidad adecuada.
La calidad de leche composicional, sanitaria e higiénica se logra en los tambos a partir de vacas sanas, con un manejo adecuado durante la rutina de ordeño: el pre-ordeño, ordeño y post-ordeño.
La rutina comienza en el campo, durante el pre-ordeño. Allí, se debe procurar un mantenimiento limpio de las instalaciones, los caminos, comederos y bebederos, así como evitar el maltrato a los animales mediante el empleo de medidas de bienestar animal y su traslado en un ambiente tranquilo, limpio y confortable.
En el patio de espera de la sala pre-ordeño, se debe garantizar la presencia de sombra adecuada, pisos no resbaladizos y espacio suficiente para las vacas que esperan su turno para el ordeñe.