âCada vez que la carne sube, inevitablemente también recibe un traslado hacia el pollo, aseguró âtajanteâ el presidente del Centro de Empresas Procesadoras Avícolas (CEPA), Roberto Domenech, a Infocampo.
El dirigente argumentó una suerte de mecanismo âautomáticoâ de traslado de las subas: âSi no lo hace la cadena, lo hace la parte comercialâ, sentenció.
Los polleros mantienen un compromiso con el gobierno de no superar los $2,70 más IVA al mayorista, ây también a respetar el mercado a la baja, es decir que aunque se reduzcan las entregas diarias, no va a haber un aumentoâ, explicó Domenech.
Pero, en medio de las prolongadas negociaciones que realiza la industria avícola con Guillermo Moreno ânos explotó el tema del maíz, por lo que le pedimos al funcionario que nos dé alguna solución para bajar el costo o para ajustar el precio, porque realmente el sector está perdiendo plataâ.
En concreto, Moreno le pidió a los polleros que le indiquen sus requerimientos para no subir el precio y ânosotros le dijimos que necesitábamos valores históricos de maíz. A esto, Moreno nos contestó que vería de qué manera conseguía estos valores históricos para el cerealâ.
Es que la escalada alcista del maíz no se detiene en los mercados internacionales. De hecho, en los últimos meses se acumuló una suba en los precios âque llega a los u$s70 en maíz, u$s50 a u$s60 en trigo y u$s80 en sojaâ, detalló a Infocampo el consultor Pablo Adreani.
El experto anticipó que los altos rindes en soja y maíz que esperaba el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA) âestá dando una sorpresa a la baja. De ocurrir esto, sería como echar más nafta al fuegoâ, ejemplificó Adreani.
Es que los fondos de inversión no sólo están sobrecomprados en posiciones disponibles en maíz y soja actual, sino que están comprando cosecha 2007/2008, âcon lo que el escenario de justeza es estructural y con una cosecha no se corrigeâ.
Un escenario similar prevé el CEPA para 2007 en cuanto a los altos valores de los cereales. Sin embargo, este potencial escenario, con un incremento en los costos de los polleros, conllevaría también un cambio relativo de las proteínas animales.
âEn los últimos cinco años, los precios de las proteínas vegetales han sido favorables para transformarlos en cualquier tipo de carne. Entonces, es previsible que este equilibrio continúe, pero hay que observar el comportamiento del consumidor ante estos incrementosâ, advirtió.
Domenech además consideró que un potencial aumento en las proteínas animales âproducto de una suba en los costos alimentariosâ podría conllevar igualmente una transferencia de consumo hacia el pollo, âal ser la carne que menos maíz utiliza para hacer un kilo (se necesita 1,3 kg de maíz, para lograr un kilo de pollo), en comparación con el cerdo (usa 2,4 kg de maíz) y con la carne vacuna (requiere 4,4 kilos)â.
Finalmente, Domenech anticipó que en la primera quincena de diciembre se reunirá con la ministra de Economía, Felisa Miceli, para anticiparla sobre la voluntad de cuatro empresas en invertir en el sector avícola nacional. Estos capitales âquieren iniciar un proyecto llave en mano, un molino de alimento balanceado, una planta de incubación, granjas de reproductoras, granjas de parrilleros y una planta de faena. Se va a trabajar sobre fuentes de financiación a largo plazo, con un mínimo de 20 años, a tasas accesiblesâ.
Marianela Garbini
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