La industria exportadora fijó su posición ante el Decreto 443/23 y sostuvo que cada empresa decidirá si ingresa al nuevo “Dólar Soja” y de qué manera operará. “No estamos frente a un típico programa exportador”, advirtieron desde la Cámara de la Industria Aceitera y el Centro de Exportadores de Cereales (CIARA-CEC).
Mientras el Gobierno busca captar unas 11 millones de toneladas en manos de los productores, para aumentar el nivel de reservas, los exportadores analizan los pasos a seguir. En esta novela, cada actor tiene su libreto ajustado: Economía necesita sumar dólares en plena carrera electoral y con números en rojo. Por su parte, la industria está preocupada por la falta de materia prima para activar su polo de crushing.
“Cada exportador tomará esa decisión sobre la base de sus necesidades de molienda y/o del programa de exportación de soja y subproductos de la soja de origen argentino”, remarcaron desde la entidad presidida por Gustavo Idígoras. Y agregaron: “Por eso, desde CIARA-CEC no emitiremos análisis o datos”.
En este contexto, los exportadores reiteraron sus principales demandas para agilizar el ingreso de divisas: unificación cambiaria y eliminación de restricciones al comercio exterior.
“Pensar y ejecutar una política exportadora inclusiva y federal, además de generar mayor ingresos de divisas y más empleo, nos permitirá consolidar a la Argentina como líder en el comercio internacional de alimentos, biodiesel y tecnología”, consideraron,
¿QUE PASARÁ CON LAS VENTAS?
En paralelo, queda ver como reaccionarán los productores ante este nuevo escenario de precios en la línea de largada para la siembra gruesa 2023/224.
Sebastián Salvaro, analista de la Consultora AZ Group, destacó que si los precios seducen, los productores podrían vender.
“Era la noticia que se esperaba para seguir tomando algunas decisiones comerciales, que estén relacionadas justamente con la compra de algunos insumos que falta comprar para campaña que viene”, señaló a Infocampo el analista.
“Si los precios están en una paridad más cercana a los $160.000, probablemente veamos ventas de parte de productor, alineadas a poder ir terminando de armar la campaña 2023/24″, sostuvo. En contrapartida, explicó que quienes no decidieron vender están esperando ver que ocurre en las elecciones generales de octubre.
Por el lado de las entidades que representan a los productores, Nicolás Pino, presidente de la Sociedad Rural Argentina (SRA), afirmó que la medida es “un beneficio para el Gobierno y la industria, no garantizando nada a los productores”.
“Esperemos que el mercado se normalice porque hace una semana que está paralizado y los productores necesitamos tener precios de referencia”, agregó.
