Un equipo de investigadores del INTA Famaillá promueve el desarrollo de la Indicación Geográfica (IG) de miel de azahar de limón de Tucumán. Con 40.000 hectáreas dedicadas a la producción de limón, Tucumán lidera la producción y exportación de estos cítricos a escala mundial. Gracias a esta particularidad, los apicultores de la provincia obtienen un alimento con características únicas y que es muy demandado por los consumidores: la miel de azahar de limón.
Las condiciones climáticas, el tipo de suelo y los saberes propios de los apicultores familiares de la provincia confluyen en un producto cuyas características sensoriales, nutricionales, antioxidantes, antimicrobianas y flebotónicas lo posicionan como un alimento con atributos funcionales y saludables.
“Se trata de una iniciativa de alto impacto comercial y económico. Es una miel con características sensoriales muy apreciadas por el consumidor. Es muy clara, de sabor suave y ligeramente ácido que cristaliza finamente y da una cremosidad al paladar bastante especial. Y, por supuesto, tiene el aroma particular del azahar”, aseguró Alejandro Álvarez, especialista en Agroindustria del INTA Famaillá.
“Las condiciones naturales de nuestro territorio le otorgan a la miel de azahar de limón determinadas características físico químicas, sensoriales y biológicas específicas que resultan en una calidad diferenciada”, destacó Álvarez.
A partir de un exhaustivo análisis, realizado por el Laboratorio de Agroindustria del INTA Famaillá junto con la Universidad Nacional de Tucumán, el INBIOFIV (Conicet) y el Laboratorio de Palinología de la Universidad Nacional de Jujuy, se pudo determinar que la miel de azahar de limón posee flavonoides que le aportan una capacidad antioxidante, antimicrobiana y flebotónica (especialmente la hesperidina y hesperetina), lo que le otorga el carácter de alimento con características funcionales y saludables.
Asimismo, los productores asociados a la Cooperativa Norte Grande y a la Asociación Civil Tucumana de Apicultura (ACTA) avanzaron en el desarrollo e implementación de un protocolo de Buenas Prácticas Agrícolas en el campo para la obtención de la miel y de Buenas Prácticas de Manufactura en las salas de extracción.
En este sentido, desde marzo de 2017, el INTA junto con representantes del gobierno provincial de Tucumán, del gobierno nacional, la Facultad de Agronomía y Zootecnia de la Universidad Nacional de Tucumán, la Cooperativa Norte Grande, la Asociación Civil de Apicultores y el Clúster Apícola de la provincia, avanzan en el reconocimiento y registro de la Identificación Geográfica ‘Miel de azahar de limón de Tucumán’.
“El objetivo final de obtener este sello de IG es conseguir un producto de alto valor agregado, cuyo beneficio económico sea apropiado por los pequeños productores que trabajan asociados y no quede en otros eslabones de la cadena”, expresó Álvarez.