La Asociación de Trabajadores de la Industria Lechera (Atilra) convocó anoche a un paro nacional en todas las plantas lecheras del país en “solidaridad” por la situación de SanCor, que atraviesa una profunda crisis que mantiene paralizadas sus plantas en todo el país, tras cientos de despidos y suspensiones.
La medida es en reclamo de una solución inmediata, luego de que el Gobierno Nacional, dirigentes y sindicatos no lograran llegar a un acuerdo para avanzar en la reestructuración de la cooperativa láctea, a la cual el Ejecutivo le otorgará un crédito por $ 450 millones.
Por su parte, la Asociación de Pequeñas y Medianas Empresas Lácteas (APYMEL) y el Centro de Industria Lechera (CIL) rechazaron el paro y aseguraron que es “sorpresivo e injustificado”.
Los conflictos crecieron a causa del aporte extraordinario, una suma de dinero que Atilra recibe bajo el concepto de bono por parte de las empresas, y que resultó el detonante en las negociaciones que venían llevando a cabo los eslabones de la cadena con el Ejecutivo. “El convenio laboral es inviable”, dijo el presidente Macri al respecto ayer, al tiempo que deslizó que si no hay acuerdo habrá que “salir a buscar un socio” para la empresa.
En ese sentido, APYMEL y CIL coincidieron en el pedido de reducir el aporte extraordinario, lo que provocó la contundente respuesta sindical.