Este jueves se realizó una nueva audiencia en Lincoln por la situación de los 21 trabajadores de SanCor Arenaza, que cerró sus puertas en agosto pasado y mudó la producción de Mendicrim a su planta de Devoto, en Córdoba.
El conflicto ya lleva cuatro meses, en los que los despedidos llevaron adelante un plan de lucha para exigir respuestas en relación a su futuro laboral. Ahora, se dictó la conciliación obligatoria, por lo que se espera que cesen las movilizaciones de #Los21DeMendicrim, como se dieron en llamar en las redes sociales.
La audiencia de hoy contó con la presencia del intendente de Lincoln, Salvador Serenal; representantes de Alimentos Refrigerados SA (ARSA), que estaba a cargo de ese establecimiento; dirigentes de Atilra y la concejal local Mercedes Ruffa (Frente de Todos). En tanto, por parte de SanCor no hubo representantes.
“Además de dejarlos sin su fuente de trabajo, pretenden aplicar el artículo 247 del Convenio Colectivo de Trabajo a su indemnización, es decir, que solo cobren el 50%”, habían denunciado desde Atilra, el gremio lechero, tiempo atrás.
La nueva audiencia se realizará el próximo 7 de enero en el Ministerio de Trabajo de la ciudad de La Plata.