Las restricciones de uso de energía eléctrica para grandes consumidores comenzó a afectar a la industria frigorífica. Hasta ahora se vienen aplicando cortes entre las 16.00 y las 24.000 horas. Pero el panorama se complicará si, tal como se prevé, las interrupciones del suministro comienzan a extenderse durante todo el día.
“Hasta ahora seguimos comprando igual cantidad de hacienda, pero veremos que pasa si las restricciones alcanzan las 24 horas”, dijo hoy a Infocampo Jorge Torelli, del grupo de frigoríficos Mattievich, que cuenta con siete plantas en la provincia de Santa Fe.
âAdelantamos los horarios de faena y estamos poniendo en funcionamiento nuestros generadores propios para cumplir con lo dispuesto por el gobiernoâ, remarcó Torelli.
âPero la situación se puede complicar más si se cumplen las versiones que indican que la reducción de energía alcanzaría las 24.00 horas (del día). Ahí sí vamos a sentir mucho los incrementos de nuestros costos de producciónâ, añadió.
Las principales compañías frigoríficas argentinas cuentan con grupos electrógenos propios. Sin embargo, desde la semana pasada se viene reduciendo, en general, el ritmo de faena para evitar que los sobrecostos energéticos erosionen los márgenes previstos.
Daniel Urcía, titular de la Asociación de Frigoríficos Industriales de Córdoba, señaló hoy que en esa provincia la empresa de energía local (EPEC) está anunciando los cortes con una hora de anticipación, lo que hace imposible culaquier tipo de planificación.
âSi se cumple lo que dicen, que las restricciones serán durante las 24 horas, ahí nos vamos a ver complicadosâ, remarcó Urcía.
Según el empresario, en Córdoba la actividad de desposte se ve afectada en torno a un 50%, mientras que la faena, por el momento, se realiza normalmente a partir de la readecuación de los horarios de trabajo. âSi esto fuera en verano, estaríamos con serios inconvenientes para proveer el mercadoâ, dijo Urcía.
En la provincia de Buenos Aires los frigoríficos también experimentan complicaciones. Los más comprometidos, en este caso, son los matarifes de los cordones sur y oeste del Gran Buenos Aires, mcuhos de los cuales no disponen de grupos electrógenos.
En los próximas horas la Secretaría de Energía de la Nación daría a conocer una resolución para sancionar a aquellas empresas que no hayan acatado la orden de dejar de consumir, la cual se estima no es cumplida por la mitad del sector. La cuestión es que, a diferencia de otras industrias, los frigoríficos (al igual que las compañías lácteas) operan con mercadería perecedera que no puede salir de la cadena de frío.
Gustavo Malem