“Cuando estudiaba agronomía el consumo de fertilizantes en el país era de 100 mil toneladas. Hoy es de 2 millones 600 mil toneladas. Siendo un poquito técnico, estamos extrayendo tres veces a uno lo que incorporamos. Estamos exportando dentro de los granos los nutrientes que estamos sacando del suelo. La buena noticia es que los suelos ricos argentinos siguen siendo ricos, pero la mala noticia es que si seguimos a este ritmo de extracción, independientemente si el fertilizante sea un negocio o no, se lo va a necesitar.”