Este 5 de junio se celebra en todo el mundo el Día Mundial del Medio Ambiente, una fecha en la que se busca concientizar a la humanidad acerca de la importancia del cuidado del planeta.
Según datos de Naciones Unidas, cada tres segundos se pierden superficies de bosques del tamaño de una cancha de fútbol, el 50% de los arrecifes de coral se perdieron, y la mitad de los humedales están destruidos.
Mientras los ecosistemas continúan en constante deterioro, la emisión global de gases de efecto invernadero se encuentra en crecimiento constante desde hace aproximadamente tres años.
El desembarco del COVID-19 no hizo más que confirmar cómo el ser humano se apropió de ecosistemas y dejó impactantes postales de la naturaleza retomando el control de estos espacios, urbanizados, alrededor del mundo, producto del confinamiento obligatorio al que las sociedades fueron sometidas de manera global.
Es por eso que este año el Día Mundial del Ambiente se centra en la restauración de ecosistemas bajo el lema “Reimagina, recrea, restaura”.
Es decir que el objetivo es trabajar en prevenir, detener y revertir ese daño, motivando a las personas y comunidades a involucrarse en el desarrollo sostenible, a mejorar sus hábitos de consumo, a las empresas pedirles que desarrollen modelos más ecológicos y exigir a los gobiernos a proteger las zonas salvajes.
Para ello, este sábado arrancará el Decenio de las Naciones Unidas sobre la Restauración de Ecosistemas (2021-2030), misión que tendrá como fin revivir miles de millones de hectáreas, trabajar en el retorno de plantas y animales que hoy están al borde de la extinción, como también cultivar árboles, reverdecer ciudades, repoblar nuestros jardines con especies silvestres o limpiar la basura de los ríos y costas.
