A partir de este lunes, 22 de febrero, el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) exigirá que el movimiento de uva, cuyo destino sea la vinificación, se deberá realizar con el correspondiente “Documento de Tránsito Vegetal electrónico (DTV-e)“.
Dicho documento deberá acompañar la carga de vid en todo momento, desde que sale de la finca productiva hasta que llega a la bodega, y podrá ser exigido por las autoridades oficiales en los controles que se realicen en las rutas de todo el territorio nacional.
El uso del DTV-e es obligatorio a partir de la Resolución N° 31/2015 del Servicio, y se viene implementando de manera gradual para el traslado de distintos productos vegetales.
En el caso de la uva, hasta ahora solo se había exigido para destino consumo en fresco y para algunos traslados de uva para vinificar, en el marco de procedimientos específicos de la Dirección Nacional de Protección Vegetal del Senasa.
Cabe recordar, según Senasa, que el 96% de la uva en Argentina tiene destino de vinificación. Recientemente, el Instituto Nacional de Vitinicultura proyectó que la producción de vid esta temporada alcanzaría, aproximadamente, 1,93 millones de toneladas.
De esta forma, el DTV-e constituye una herramienta fundamental para minimizar los riesgos de dispersión de plagas de vegetales a partir del movimiento de productos, subproductos y derivados de origen vegetal durante su tránsito.