Con el avance la tecnología, la precisión en la maquinaria agrícola puede ser estándar, también el usuario puede pagar por un servicio determinado, pero también el productor o el contratista pueden conseguirla, igualmente, utilizando herramientas gratuitas.
¿Cómo? Instalando la aplicación correcta en su celular.
Juan Pablo D’Amico es un experto en maquinaria agrícola del INTA Hilario Ascasubi, al sur bonaerense, y también se está transformando en especialista en digitalización.
Está contento y se siente realizado ya que, poco a poco, puede respetar su objetivo de lanzar una aplicación para teléfonos celulares por año, gratuita y que ayudan al grueso de los productores y contratistas a ser más precisos con las máquinas agrícolas.
Este año, y en solo 70 días de trabajo intensivo, él y tres programadores aislados por el Covid-19, desarrollaron CAMPERO. Bajo condiciones normales, ellos hubieran trabajado seis meses para lograr el mismo objetivo.
“Es una aplicación pensada para el productor que quiere hacer mejor la tarea de siembra y quizás no cuenta con la última generación de tecnologías. Por ello, desde el INTA trabajamos para poder proveérsela”, dice el especialista sobre CAMPERO a Infocampo, la cual fue ideada para una multiplicidad de cultivos, extensivos e intensivos.
Luego de muchos años de trabajo, D’Amico sabe que el 90% del parque de maquinaria tiene una media tecnología. “Nosotros apuntamos a ese gran grupo y que con nivel de innovación que tengan, puedan hacer muy bien cada tarea. Siempre, lo más importante, es que la sembradora esté bien regulada”, aclara.
CAMPERO permite calcular muchos parámetros, pero D’Amico se refirió a tres aspectos puntuales.
“La primera funcionalidad que tiene la aplicación es calcular la densidad y convertirla a densidades de interés agronómico (kilos de semilla por hectárea, semillas por hectárea, distancia entre semillas, semillas por metro, población objetivo). Esto es revelador porque hay muchos productores que no saben la densidad de semillas que implantan y, operativamente, se trata de un conversor de unidades”, señala.
En esta cuestión hace un alto y explica lo que suce de en maíz, uno de los cultivos que tienen una denso-dependencia marcada además que, de esta forma, puede explicar sobre otra de las funcionalidades ya que la app calcula el grado de fallas/aceptables de esta semilla.
Según él, parámetros estadísticos como el desvío estándar o el coeficiente de variación que tradicionalmente se adoptan para referirse a la desuniformidad de distribución entre plantas, no se pueden correlacionar con las pérdidas de rendimiento.
“Muchos trabajos científicos, inclusive también lo demostré con mi tesis de maestría, evidencian que estos son solo datos estadísticos y, por el contrario, a lo que se considera, las duplicaciones de semilla terminan aumentando el rendimiento porque aumentan la densidad. Además, los cultivos no siembran a las densidades máximas”, explica.
A esto agrega que una duplicación como evento aislado dentro de un cultivo puede mantener el rendimiento o incluso rendir más que una planta aislada. En cambio, D’Amico si afirma que con las fallas se puede perder rendimiento porque, en este caso, faltan las plantas en el lote.
Otro de los aspectos importantes de CAMPERO es que ayuda en el cálculo de los parámetros de la labor.
“La app es útil porque permite la regulación de la máquina (chorrillo o monograno). Allí también se puede cargar la dosis del fertilizante (línea o lateral), u otro insumo, para hacer el cálculo de la dosis. Luego de eso se va a parámetros de verificación para hacer la prueba de siembra y determinar de esa forma si el dosificador está dentro del rango de dosificación correcto”, explica D’Amico.
En la medida que se va haciendo la tarea se arma un reporte. Con este, una máquina que no tiene ningún tipo de tecnificación puede generar una información, siendo una aliada para el contratista ya que sirve brindar un reporte de la labor.
“Es una aplicación simple, que no ocupa espacio en megas con la descarga. Somos conscientes que nadie dejará de tener Instagram por CAMPERO, pero sabemos que muchos también la necesitan para aumentar su precisión”, alienta.
CRIOLLO
D’Amico no solo es el desarrollador de CAMPERO, también tiene en su haber el desarrollo de más aplicaciones. Hace cuatro años presentó la primera versión de CRIOLLO.
De ese entonces, lanzó una versión por año de CRIOLLO: Botalón, Atomizador y Mochila. Es decir, son tres apps diferentes en una.
“Criollo permite calcular los principales parámetros de operación de pulverizadoras terrestres de botalón y realizar la verificación estática correspondiente”, considera D’Amico.
Es decir, será posible calcular alternativamente la velocidad de avance del equipo, la presión de trabajo y el volumen de pulverización para un tamaño de pico y una distancia entre picos determinada.