Las primeras estimaciones de la campaña 2022/23 de maní que hizo la Bolsa de Cereales de Córdoba indican que este año se sembrarán unas 277.300 hectáreas en esa provincia, de la que sale el 89% de la producción total a nivel país, según datos del Sistema de Información Simplificado Agrícola (SISA) del Instituto Nacional de Semillas (INASE).
Eso representa una caída de 6% en la superficie de siembra si se compara con la campaña anterior y se debe a diversos factores, pero los especialistas hacen énfasis en dos que vienen marcando el pulso de los últimos ciclos.
Uno es común a todos los cultivos y es difícil de suplir, porque es una variable ambiental que el productor no puede manejar: la sequía.
En el otro, que es los problemas sanitarios sufridos por el maní en la última campaña, el manejo agronómico sí tiene mayores posibilidades de lograr un éxito productivo.
PRONUTIVA
En ese sentido, teniendo en cuenta las limitantes del ciclo anterior, producir vuelve a ser un desafío que requiere de aliados. Y UPL, bajo su programa Pronutiva, integra protección de cultivos y biosoluciones para atender las necesidades del maní durante todo su desarrollo.
Desde el inicio del ciclo, la compañía india propone la incorporación de un terápico de semillas como RANCONA TRÍO, el fungicida triple mezcla con amplio espectro de control en los principales hongos que atacan durante las etapas iniciales del cultivo.
Uno de los ejes que lo distinguen es que contiene tres principios activos con tres modos de acción diferentes (Ipconazole + Metalaxyl-M + Carboxin). Además, se combina el control por contacto con la acción sistémica, protegiendo al cultivo varias semanas luego de la emergencia.
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El producto es compatible con el uso de inoculantes, bioestimulantes y no genera fitotoxicidad. Su uso redunda en un mayor número de plantas, más uniformes y de mayor vigor, lo que impacta directamente de forma positiva en el rendimiento. Además, es una excelente herramienta para combatir la aparición de patógenos resistentes, colaborando con la sustentabilidad de los sistemas productivos.
BIOLÓGICOS
En tanto, otros tres productos biológicos completan la propuesta de UPL.
BIOZYME TF. Formulado a base de extractos de plantas con actividad hormonal, sumado a micronutrientes como el Manganeso, Zinc, Hierro, Magnesio, Boro y Azufre.
Se puede aplicar en tratamiento de semillas para mejorar su vigor y hacer que la planta genere más raíces y tenga más exploración de suelo y más captación de nutrientes y agua.
Pero también se puede acudir a este producto natural en etapa foliar (en R1 y R2), para acelerar el crecimiento de las plantas, incrementar el número y tamaño de frutos y, por ende, aumentar el rendimiento tanto en kilogramos por hectárea como en calidad de cosecha.
BIOTRON PLUS. Un fertilizante foliar de origen natural que contiene macronutrientes (Nitrógeno, Fósforo y Potasio) y micronutrientes (Hierro, Magnesio, Zinc, Manganeso, Boro, Cobre y Molibdeno), además de ácidos húmicos que aseguran la absorción y transporte de los nutrientes dentro de la planta
También cuenta con folcisteína, un antiestresante que actúa de forma preventiva ayudando a la planta a contrarrestar los efectos del estrés abiótico que limitan el protencial productivo. Se trata de un aliado estratégico para sobrellevar las temperaturas de enero o la falta de humedad.
Sus aportes se basan en la promoción del desarrollo vegetativo de la planta y la reactivación de los procesos fisiológicos para contrarrestar los efectos nocivos del estrés y la corrección de las deficiencias nutricionales, pero también incrementa el rendimiento y la calidad de la cosecha.
K-FOL. Un fertilizante foliar con alto contenido de potasio, cuya fórmula está diseñada especialmente para usarse en la fase final o de fructificación del maní (R5-R6) para redireccionar todos los fotoasimiliados a las cajas, con el objetivo de incrementar la consistencia, calidad y tamaño de los frutos, lo que mejora la relación caja/grano y aumenta el porcentaje de confitería.
También puede utilizarse de manera estratégica para acelera la maduración en casos en los que traiga retrasos, ya que aumenta los puntos de madurez ante problemas de hongos de suelo al final del ciclo (como Sclerotinia spp, Fusarium spp, Sclerotium spp).
“Con las tecnologías de protección de cultivos y biosoluciones de UPL, cuidar y potenciar al maní desde etapas iniciales es posible”, resumieron desde UPL.
