Paula comenzó este emprendimiento junto con su marido Andrés hace cinco años. Realizan productos de cosmética e higiene sólidos y 100% naturales. No los testean en animales, no usan parabeno, siliconas ni sulfatos.
Infocampo conversó con Paula, quién lo puso al tanto de cómo fueron sus inicios y en qué se basó para la creación de estos productos ecológicos.
“Nuestra hija mayor tenía 5 años en ese entonces y mostraba signos de desarrollo precoz (olor en axilas como un adolescente, bello pubiano). Hicimos algunos estudios y se descartó el tema alimentos”, contó Paula.
“Son los cosméticos“, le aseguró el endocrinólogo.
Paula entró en confusión, ya que la niña tenía tan solo cinco años y usaba solo lo necesario para el aseo personal.
“Ese día empezamos a leer etiquetas y no entendíamos por qué nunca nos cuestionamos lo que estábamos usando. Tomábamos de la góndola como hormigas siguiendo un camino marcado por el resto de las personas”, dijo la fundadora.
Sacó su título de de bioquímica guardado en un cajón y se puso a buscar opciones. “Investigué, estudié y empezamos con jabones y desodorantes. A los pocos meses seguimos con shampoo y finalmente crema. Lo necesario para una higiene rutinaria”, afirmó.
Desde ese momento, todo cambió y los signos de su hija se frenaron. Hoy con diez años sigue niña.
Shampoo sólido libre de lauril sulfato de sodio (SLS)
“Las mamás del colegio empezaron a compartir sus experiencias y a pedirnos lo que hacíamos. No era la idea, pero las oportunidades no se buscan, llegan. Y acá estamos, trabajando pasito a paso cada día y agradecidos profundamente”, contó.
Y así surgió La Botica Eco, un emprendimiento familiar donde buscan saciar las necesidades higiénicas de la manera mas natural posible, sin el uso de productos químicos y de una manera sustentable ya que no contamina el medio ambiente.
“Se trata de productos biodegradables, es decir, que puede descomponerse en elementos químicos por la acción de uno o más agentes biológicos. Además en la elaboración no generamos desechos que contaminen el ambiente”, aseguró Paula.
La diferencia entre sus productos y los comerciales está en los ingredientes .“Usamos materia prima noble y de origen vegetal. Hacemos los productos a mano, de forma artesanal y en lotes pequeños”, contó.
Los ingredientes principales que utilizan son aceites de coco y oliva, mantecas de Karité, mango y cacao, ceras, aceites esenciales, almidón de maíz y bicarbonato de sodio.
“Elaboramos jabones y shampoos con el método más primitivo: la saponificación. Es una reacción química de muy alta temperatura en la que se mezclan grasas (en nuestro caso aceites de coco y oliva) con una base, dando como resultado una sal sódica (jabón) y glicerina. A las 24-48 horas desenmoldamos, cortamos a mano y dejamos madurar cada jabón y shampoo durante 4 a 6 semanas para obtener un producto con mayor dureza y vida media. Luego empaquetamos y están listos para salir a la venta. Es un proceso muy artesanal y reconfortante”, describió la emprendedora.
El principal mensaje que quiere dar La Botica Eco es tener presente siempre a la naturaleza y no caer en los productos comerciales.
“Hubo un paréntesis en la historia en el que buscar un cosmético en la góndola era más simple que buscarlo en la naturaleza. Y ahí nos desenfocamos, dejamos de conocer las propiedades de las miles de plantas que tenemos a disposición. Los productos naturales no tienen letra chica. Uno puede usarlo conociendo su origen y sabiendo que no está dañando al medio ambiente. Para nosotros es un camino de ida”, concluyó Paula.
