El presidente de la Cámara Argentina de Inmobiliarias Rurales (CAIR), Javier Christensen, dijo que “lo que prima es la incertidumbre” en el mercado de ese sector con vistas a las elecciones presidenciales de octubre próximo.
“No hay una propuesta concreta de parte de los candidatos, el anterior gobierno fue un castigo para el campo, y el actual oficialismo tampoco ayudó al sector, por lo tanto lo que prima es la incertidumbre en el mercado inmobiliario rural”, declaró a Télam.
“A nivel de la producción, fue un año excelente, porque la última campaña fue muy buena, con excelentes rindes de soja, por lo que el sector se movió un poco, pero fue gente más ligada al campo que la que anda buscando algún negocio inmobiliario o inversión”, apuntó.
Dijo que la financiación “la otorga en gran parte el vendedor, porque las entidades crediticias no están mirando al sector”
Christensen remarcó que en lo que va del año “se registraron cuatro subas mensuales consecutivas, aunque hay una importante caída interanual, del 21 por ciento” .
Sin embargo, los registros de la compraventa de campos parece haber cambiado la tendencia y en abril concretó la cuarta suba consecutiva, matizó el empresario.
De acuerdo al índice de InCair, el mes pasado marcó 36,44 puntos, con una variación intermensual que refleja una suba del 6,5 %.
“La nueva medición significó una leve mejoría con respecto al mes pasado y marca una tendencia alcista que se repite desde enero de este año”, destacó.
“A pesar de esto, sigue siendo muy bajo el índice general de la actividad”, agregó.
El presidente de la CAIR advirtió que “la pérdida de confianza en el futuro de la economía, medida en riesgo país y la caída del valor de los títulos soberanos son factores que continúan afectando a nuestra actividad”.