En Córdoba quedó constituida la red científico-tecnológica del Maní argentino, un ente que aglutinará a todos los sectores que intervienen en dicha área de producción para fortalecer la industria.
En el acto de lanzamiento estuvo presente el vicegobernador provincial, Martín Llaryora, y los ministros de Ciencia y Tecnología, Walter Robledo; de Agricultura y Ganadería, Sergio Busso; y de Industria, Roberto Avalle.
El acta de constitución fue suscripto por representantes de sectores académicos, gubernamentales y productivos de todo el país.
La iniciativa responde al objetivo de articular acciones tendientes a fortalecer la industria del maní, identificar demandas y oportunidades y potenciar las investigaciones aplicadas desde el campo académico.
Bajo ese enfoque, se asume como un espacio integrado por representantes de instituciones vinculadas a las actividades de investigación, desarrollo, innovación, producción y comercialización del maní, con base principalmente en la provincia de Córdoba.
En dicho marco, y tal como explicó el ministro Robledo, la red presupone “un acuerdo de colaboración para identificar cómo financiar la solución a problemas que el sector tiene, agregar valor y darle sustentabilidad a la producción”.
Por su parte, el vicegobernador ponderó la iniciativa afirmando que se trata de uno de los grandes sectores productivos de la provincia: “El maní argentino es corazón cordobés: el 92% se produce en Córdoba y el 100% se industrializa acá”.
Para Omar Barberis, representante de la Universidad Nacional de Villa María, la firma de este acuerdo representa “la unión entre la ciencia y la tecnología”, junto a los sectores privados y productivos con ámbito público, permitiendo “una política de Estado a largo plazo para la investigación y el desarrollo”.
En la misma línea, el decano de la Facultad de Ciencias Agropecuarias y representante de la Universidad Nacional de Córdoba en la firma del convenio, Marcelo Conrero, ponderó las consecuencias positivas que tendrá la acción de vinculación para la producción del sector.
“La articulación hace aún mayor la sinergia y el uso de los recursos, sobre todo en la investigación aplicada en pos del desarrollo. Esto va a repercutir indefectiblemente en la calidad y en la cantidad de maní que se produce en Córdoba”, dijo Conrero.
A su turno, Juan Carlos Novaira, representante de la Cámara Argentina del Maní, opinó que “articular el ámbito público y el privado constituye un buen ejemplo de trabajo para eliminar las fronteras entre cada sector”. Y agregó: “El aporte de las universidades va a ser fundamental. Si no nos apoyamos en la ciencia y en la técnica nuestra producción va a seguir cayendo. El sector productivo cumple el rol de dar el foco, de indicar hacia dónde deben enfocarse los recursos y el conocimiento”.
