El nacimiento de un ternerito de 8 patas, 2 cabezas y 2 colas conmueve a la comunidad chilena de Pisis, en la comuna de Tomé.
El hecho ocurrió ayer por la tarde, cuando un productor trabajaba en el parto de una vaca y se vio obligado a solicitar ayuda a un enfermero de ganado por la dificultad del animal.
“Me demoré un rato, y al llegar la vaca ya había muerto, pero me llamó la atención que al revisarla noté algo extraño: tenía muy abultada la guata y me dí cuenta que las patas que tenía afuera estaban unidas, por ello decidimos abrirla y encontramos que se trataba de una cría malformada”, detalló Víctor Gutiérrez Oviedo, un médico con más de 40 años de trabajo de trayectoria en la zona.
Según Gutiérrez Oviedo, “estaba unida desde el pecho hacia atrás, pero con patas muy deformes”.
“Es primera vez en mi vida que me toca atender un caso así, nunca antes lo había visto, y por eso incluso me han llamado de algunos institutos y universidades de Chillán y Concepción que quieren venir a buscar la cría para estudiarla, ya que son casos muy poco frecuentes”, dijo.
Tanto la madre como la cría fallecieron.