Un total de 59 casos de Anemia Infecciosa Equina fueron confirmados en los últimos días entre el norte de la provincia de Buenos Aires y el sur de Santa Fe.
El primer establecimiento que registró casos está ubicado en la localidad bonaerense de Lincoln, donde 54 caballos dieron positivo a la enfermedad tras un análisis del Senasa a fines de junio. Luego, en julio, se detectaron cinco casos en la zona santafesina de Teodolina.
“Se estableció un vínculo epidemiológico”, explicó el Senasa en forma oficial.
Tanto el predio de Lincoln como el de Teodolina quedaron interdictados y están en proceso de saneamiento, con los equinos positivos marcados a fuego y enviados a faena. A su vez, el organismo está realizando la vigilancia epidemiológica en los establecimientos linderos.
A mitad de julio también apareció un foco en provincia de Buenos Aires, en la zona de General Alvear.
“La AIE es una enfermedad que afecta a los équidos y se transmite a través de la mordedura de algunos insectos y de cualquier objeto punzante que contenga sangre de un caballo enfermo. Es de baja diseminación y no es una zoonosis, es decir, no existe la posibilidad de transmisión del virus a las personas“, recordó el Senasa.