Faltan lluvias y de eso no hay dudas. Son meses de ausencia para muchas localidades, zonas y regiones, que están determinando el destino del trigo y afectando su rendimiento.
En este sentido, comienza la cuenta regresiva para que los registros de lluvias próximos mejoren y otorguen algo perspectiva a los trigales que están en condiciones regulares a malas y restablezcan el alto potencial de los que están en buenas condiciones (Mirar gráfico 1).
Más allá de las condiciones adversas que dejó el paso de la temporada fría, la semana pasada los productores se lanzaron firmes a sembrar maíz, con las pocas reservas presentes en los perfiles y esperando que lleguen las lluvias.
Los panoramas presentados por las Bolsa, la porteña y rosarina, dejaron el claro en nivel de avances y las intenciones de los productores.
Sobre la zona este de la región central, se avanzó un 6,5% del área total de maíz (6,2 millones de hectáreas), indica la Bolsa de Cereales porteña, mientras que la Bolsa de Comercio de Rosario señaló que sobre la zona central se sembraron 675.000 hectáreas con futuros maizales, un 45% del total de la superficie esperada.
De esta forma, llevando adelante una comparación entre las condiciones de siembra presentes y la inmediatamente anteriores (campaña 2019/20) queda en evidencia que los perfiles de agua, capa arable y hasta los 60 centímetros, no se diferencian mucho entre ciclos (Ver Gráfico 2)
Por su parte, en materia climática para estos días, el área de agrometeorología del Bolsa rosarina, sostiene que la circulación prevista para los próximos días presenta condiciones que deberían favorecer el despliegue de aire de origen tropical.
Desde hoy hasta el jueves hay tiempo como para que la influencia de esta circulación de aire deje un escenario propicio para que regresen las precipitaciones.