De alta calidad arrocera, de ciclo largo y adaptadas a las condiciones agroecológicas del norte argentino, así son las variedades Ñu Poti INTA CL y Gurí INTA CL utilizadas por el Grupo Puerto Las Palmas. Esta empresa familiar chaqueña es la más importante del país y lidera el mercado con su producción de arroz en rotación con pacú y ganó en la categoría Mejor Industria Agroalimentaria y recibió el oro en el premio La Nación – Banco Galicia a la excelencia agropecuaria.
De acuerdo con Alberto Livore, investigador del INTA Concepción del Uruguay –Entre Ríos–, “las variedades Ñu Poti INTA CL y Gurí INTA CL son de una elevada calidad molinera y culinaria, de ciclo largo con ideotipo tropical, alto rendimiento agrícola y adaptadas a las condiciones agroecológicas del norte de nuestro país”.
“Si bien se trata de una empresa tradicionalmente arrocera, con la introducción del pacú arrocero en rotación con el cultivo produjo un salto cualitativo y virtuoso que la ubica como la empresa agropecuaria más innovadora del país”.
A partir de un convenio de cooperación técnica entre la provincia de Chaco, la Asociación Chaqueña de Plantadores de Arroz (AchPA) y el INTA, existe una vinculación público-privada en la que la empresa familiar aporta el know-how para piscicultura y el organismo asesoramiento en aspectos genéticos y de manejo de arroz.
Uno de los aportes técnicos del INTA está relacionado con el diseño de un nuevo ideotipo de planta denominado “Columnar” que permite una mejor distribución espacial a fin de establecer una mayor cantidad de plantas por unidad de superficie y aumentar el techo de rendimiento.
La calidad y cantidad del agua disponible en la región es la clave para esta propuesta productiva. “Mediante la diversificación productiva, la empresa demostró que, no sólo es posible producir peces y arroz en un mismo lote sino que, además, es sustentable y rentable”, señaló el especialista.
Entre las ventajas del sistema integrado de producción, Livore señaló que gracias a que ambas producciones –arroz y peces– utilizan el mismo lote, “no es necesario el uso de fertilizantes de pre siembra debido a que los residuos de los peces actúan como fertilizante orgánico y, además, los peces controlan malezas y otras plagas”.
“Este sistema con dos actividades complementarias contribuye a obtener amplios beneficios sociales, ambientales y económicos”, agregó.
Livore destacó: “Es un privilegio que una empresa líder del país con más de 30 años de trayectoria confíe en el conocimiento del INTA para desarrollar su actividad arrocera y nos permita experimentar en la rotación con pacú”.
Asimismo, subrayó el vínculo por tratarse de un espacio de “intercambio de conocimientos” que le permite al INTA aprender de la experiencia empresarial para, así, orientar su trabajo de investigación en materia de piscicultura, además de validar y difundir los avances en genética de arroz.
