En Argentina, los pastizales se distribuyen en todo el mapa productivo y permiten sostener la cría de ganado bovino y ovino.
Ante un escenario de alteraciones climáticas, que inciden en el régimen de lluvias y afectan de manera desigual la producción forrajera, un grupo de investigadores estudió durante tres años el impacto de las sequías en nueve sitios específicos ubicados en la Patagonia argentina.
Un equipo de investigación conformado por profesionales del INTA, UBA y el Conicet evaluó el impacto de la falta de lluvias en locaciones específicas localizadas en Chubut, Santa Cruz, La Rioja, Río Negro y Buenos Aires. A partir del estudio, pudieron determinar los cambios que se generaron en la superficie y en la productividad del forraje.
“La productividad forrajera que se necesita para alimentar al ganado está fuertemente determinada por la precipitación anual, que se ve afectada con frecuencia por períodos prolongados de sequía y representa un alto riesgo para la sostenibilidad de la cría de ganado”, señaló Pablo Peri, investigador del INTA Santa Cruz.
Estudian el impacto de las sequías en la producción de forraje en pastizales
El @intaargentina, la @UBAonline y del @CONICETDialoga evaluaron durante tres años el impacto de las sequías en Chubut, Santa Cruz, La Rioja, Río Negro y Buenos Aires.
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— INTA Informa (@INTAInforma) December 14, 2022
LAS PRUEBAS
El grupo de investigadores realizó un experimento de sequía coordinado en nueve sitios de pastizales, con un régimen de lluvias de 170 a 950 milímetros y con una temperatura media anual de 5°C a 21°C.
“Estudiamos pastizales típicamente sujetos a pastoreo extensivo de ganado, altamente productivos, que abarcan una amplia gama en diversidad de especies de plantas relacionadas al forraje, tipo y textura del suelo, historia del uso de la tierra y tipo de ganado”, detalló Peri.
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En siete de los nueve sitios evaluados, se hallaron efectos perjudiciales sobre la productividad del forraje durante el primer año experimental de la sequía. En cinco de ellos, se acentuó aún más el impacto hasta el final del experimento.
“Encontramos que los pastizales áridos y semiáridos estaban más severamente dañados en su provisión de forraje debido a la sequía, en comparación con los pastizales mésicos”, explicó. En los más afectados, la productividad forrajera disminuyó un promedio de 50 %.