Hacer las cosas bien ya tiene su beneficio en Buenos Aires, y eso es gracias al nuevo programa de Buenas Prácticas Agrícolas que presentó el ministerio de Desarrollo Agrario bonaerense a través de su ministro Javier Rodríguez, durante una reunión virtual realizada con productores adheridos a la Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa (Carbap).
Similar a lo que ya tiene en práctica la provincia de Córdoba, Buenos Aires busca incentivar la producción sustentable basada en el cuidado del suelo y la aplicación responsable de agroquímicos, a partir de la difusión, capacitaciones en la materia, certificaciones y estímulos económicos.
Para Javier Rodríguez, “nosotros entendemos que la mayoría de los productores hacen bien las cosas, tienen prácticas adecuadas, y creemos que es importante reconocerlos, poder otorgarles una certificación, un aval del Gobierno de la Provincia”.
Contar con el aval dela gobernación puede ser en un futuro no muy lejano, un requisito internacional a la hora de poder cerrar algún tipo de acuerdo comercial en materia de alimentos.
Otra de las claves de este programa es que el productor que “hace las cosas bien” y produciendo cuida el medio ambiente, también pueda recibir algún tipo de beneficio económico.
Por ello Rodríguez destacó durante la reunión que “además del aval y de esta certificación, nos pareció importante también que hubiera un incentivo económico relacionado con el impuesto inmobiliario rural, así sea en un campo propio como en uno arrendado”.
Para Pablo Ginestet, vicepresidente de Carbap este “programa, junto con el Observatorio (Técnico de Agroquímicos), van a poder aportar a los municipios las herramientas científicas para mejorar todo lo que es el sistema de gestión de las aplicaciones periurbanas”.
Uno de los objetivos de Carbap es que se puede establecer un criterio macro en Buenos Aires para la aplicación de fitosanitarios, dado que actualmente cada municipio establece sus parámetros, lo cual está complicando mucho el trabajo de los productores y los contratistas rurales.