La caída de la rentabilidad en el mercado interno impulsa al sector citrícola a volcarse a las exportaciones, en el marco de una inminente suba de los precios internacionales. Es que los costos nacionales para la producción son cada vez más altos, lo cual genera riesgos dentro de la actividad.
“El productor cobra entre 1 y 1,5 pesos por kilo de sus cítricos y en los supermercados estos productos se pagan a razón de 15 a 18 pesos”, señaló el vicepresidente de la Asociación de Citricultores de Concordia, Enrique Cecilio Taylor. “El productor citrícola está hoy desfinanciado”, disparó en declaraciones a la agencia DyN.
Por eso, según la Asociación Citrícola de Concordia, la producción cayó 40 por ciento respecto de temporadas anteriores, con “menos curado de plantas, menos poda y menos abono”.
“El valor de la fruta aumenta diez veces por lo menos al ingresar en el circuito comercial”, expresó Taylor en referencia a la situación en el Mercado Central.
Mientras tanto, en los últimos días llegaron los primeros pedidos de compra de naranja de ombligo grande por parte del mercado brasileño, algo que entusiasma al sector dado que los precios internacionales se incrementarían a causa de la caída de la producción de naranja en Sudáfrica por sequía e inundaciones.
De esta manera, con un costo que superaría los 100 dólares por tonelada transportada desde Concordia hasta San Pablo, el valor en las quintas rondaría los 9,5 dólares para el cajón de 15 kilos. La mercadería se comenzaría a cargar la próxima semana.
En tanto, mercados como Canadá o Rusia son aún más tentadores para Entre Ríos, ya que en esas zonas el valor FOB es de 10,5 dólares por cajón.