Ante el creciente interés del sector ganadero de contar con disponibilidad de recursos desde la Estación Experimental del INTA Cuenca del Salado se acompaña a los productores impulsando ensayos y trabajos técnicos que permiten obtener información y mejorar el manejo. Al respecto, según explican los técnicos del Instituto de Tecnología Agropecuaria, dado que “al implantar Megatérmicas existen factores que condicionan los resultados, los ensayos buscan la eficiencia a partir de la correcta elección del cultivar, las especies de la mezcla, el sistema de siembra, la adecuada fertilización y el control de malezas e insectos”.
Según estudios realizados en la Cuenca del Salado bonaerense la introducción de pasturas Megatérmicas con el propósito de incrementar la producción de forraje en la estación cálida, en los bajos salino-sódicos, ha indicado a Chloris gayana y Panicum coloratum como las especies promisorias. Sin embargo la definición de la fecha de siembra óptima, considerando el tiempo térmico que necesita la semilla para germinar, emerger e iniciar el macollaje, implantándose antes de que bajen las temperaturas, no ha sido determinada en la zona. Al respecto, los técnicos del INTA comentan que “las normas de germinación contemplan temperaturas (Temp.) 35°C/20°C y 8-16h de luz/oscuridad (media 25°C) con registros a los 14 y 28 días (ISTA), lo que darían sumas térmicas de 210°C y 420°C (Temp. base 10°C)”.
Teniendo en cuenta la carencia de información sobre la fecha de siembra, desde la Estación Experimental Cuenca del Salado del INTA se impulsó un trabajo orientado a aportar información para definir el momento óptimo, a partir de la evaluación de la implantación de Chloris gayana y Panicum coloratum utilizando diferentes fechas de siembra, en un bajo salino-sódico en campos del Partido bonaerense de Rauch.
La implantación se consideró al alcanzar el máximo número de hojas vivas de las especies, teniendo en cuenta la vida foliar que ronda los 325-400°C (Temp. base 10°C). Para el seguimiento en un suelo Natracualf, los técnicos explican que “se diseñó un ensayo en BCA con parcela dividida y 3 bloques, donde la parcela principal fue el mes de siembra, Oct, Nov, Dic, Ene (28/oct, 21/nov, 18/dic/13, 17/ene/14), y la sub-parcelas la especie: Chloris gayana cv. Finecut y Panicum coloratum cv. Klein (Ch vs Pc), con densidades de 167semillas viables/m2 y una fertilización de base de PDA de 100kg/ha”.
La toma de datos contempló el “registro de los grados días acumulados (GDA = Temp. media diaria del aire – Temp. base 10°C), desde la siembra considerando a los 210°, 420° y 800°C GDA como inicio y fin emergencia e implantación, respectivamente”. En emergencia se contabilizó la densidad de plántulas en pl/m2 (con 3 marcos de 0,1m2)”, mientras que “en implantación se registró por parcela: la fenología (%vegetativo/ reproductivo, el %cobertura vegetal (Cob), la producción de materia fresca y seca (MF y MS, cortando 2 marcos de 0,5m2, secando en estufa a 60°C), y se calculó el porcentaje de MS (%MS) y MF y la MS en kg/ha”. Además con el ensayo “se realizó análisis de varianza para Cobertura y Materia Seca, con medidas repetidas para densidad, y comparación de medias con prueba LSD y una significancia de p<0,05 (Proc Mixed/pdiff, SAS)”.
En el proceso los técnicos pudieron observar que “la condición ambiental fue particular, presentando sequía intensa en invierno, octubre y diciembre, y momentos de exceso de lluvias en febrero-abril, provocando anegamientos transitorios en algunos bloques”.
Las siembras se iniciaron en Octubre, “momento en que las temperaturas medias mensuales superaron los 10°C y disminuía el riesgo de heladas”; y se culminaron en Enero, “para alcanzar los 800°C GDA antes de que las temperaturas bajaran 10°C”. Según comentan los profesionales “la densidad de plántulas no presentó interacción, ni efecto debidos a la fechas (inicio y fin: 21 vs 28pl/m2) o especies, sólo debido al mes de siembra”. A la implantación “las variables no presentaron interacciones significativas, la Cobertura presentó efecto de Mes y especie, y la Materia Seca sólo efecto de especie”. En el transcurso del ensayo “las plantas de Ch se mantuvieron en estado vegetativo y las de Pc pasaron a reproductivo sólo en las siembras de Oct y Nov, con valores de 7% y 42% de los macollos reproductivos, respectivamente”.
El porcentaje de cobertura y la Materia Seca “fueron superiores en Ch comparado con PC”, este comportamiento según los técnicos, “podría deberse a las lluvias, que permitieron desarrollar estolones en Ch y cubrir el suelo, multiplicando los puntos de crecimiento, potenciando las escasas diferencias en densidad la MS muestra una escasa diferencia entre meses de siembra, con mayores valores en Oct y Nov.”. Con el rango de fechas de siembra evaluado en ambas especies, “Octubre fue el mes con mayor densidad de plantas logradas y mejor cobertura del suelo”, y aunque no se registraron diferencias significativas en MS entre meses, “se alcanzó la implantación a fines de enero, permitiendo continuar el crecimiento con temperaturas superiores a 10°C por más tiempo, comparado con las restantes fechas”.
Con el trabajo los técnicos de la Experimental Cuenca del Salado del INTA pudieron determinar que en la localidad de Rauch y bajo las condiciones climatoedáficas en que se desarrolló la experiencia, “la mejor implantación se logró en el mes de Octubre, tanto para Chloris gayana como para Panicum coloratum.
Desde el INTA se destacó la colaboración en el trabajo por parte de referentes de la Escuela Agrotécnica E. Díaz Vélez de Rauch y la Fundación San Francisco, como también a los de la Sociedad Rural de Rauch por el aporte de los registros de lluvias; y al PRETs Cuenca del Centro – EEA Cuenca del Salado/INTA, por el financiamiento otorgado.