El ministro de Producción de Chaco, Gabriel Tortarolo, anunció hoy que en la provincia se instalarán diez nuevas estaciones agrometeorológicas para la prevención de inconvenientes por cuestiones climáticas.
El gobierno provincial fundamentó la decisión en las sequías, inundaciones y lluvias registradas durante los últimos años, que ocasionaron pérdidas millonarias en el sector agropecuario chaqueño.
Tortarolo dijo que “es necesario trabajar en todos los frentes posibles para mitigar los efectos devastadores del riesgo climático” y que se necesita información de base para “planificar las medidas de prevención”.
Las estaciones trabajan en paralelo al radar agroclimatológico instalado en el Aeropuerto de Resistencia, que a la vez es similar a los existentes en Paraná, Entre Ríos, y en Pergamino, en la provincia de Buenos Aires.
El tema fue abordado en la tercera Jornada Nacional de Siniestros Agrícolas, que contó con la presencia de autoridades nacionales, funcionarios y técnicos de Corrientes, Formosa, Misiones, Santiago del Estero, Tucumán y Mendoza.
El evento fue organizado por la Federación Argentina de la Ingeniería Agronómica (FADIA) y el Consejo Profesional de Ingenieros Agrónomos del Chaco (CPIACH), con el auspicio del Ministerio de Producción del Chaco.
Por otra parte, el subsecretario de Coordinación Política del Ministerio de Agroindustria de la Nación, Hugo Rossi, dijo que se decidió avanzar con la implementación de un seguro agrícola y que su puesta en funcionamiento llevará un período de dos o tres años como mínimo.
Rossi señaló que en el transcurso de este año hay 16 provincias declaradas en emergencia nacional y el fondo que llega a 500 millones de pesos es insuficiente. “Es por ello que Nación y las provincias tenemos que reforzar los trabajos de prevención de los riesgos climáticos”, remarcó.
El funcionario dijo que el gobierno nacional planteó la necesidad de un nuevo sistema de gestión de riesgo integral para el sector agropecuario que tiene tres pilares: prevención, atención de fenómenos recurrentes y de mediano impacto, y las emergencias.
Esto debe complementarse con los seguros en “las diversas gamas de coberturas que puede llegar a haber, y la atención de las emergencias, fondos anti cíclicos o anti catástrofes”.
Con respecto al seguro por índice para el cultivo de algodón, anticipó que hay un trabajo técnico terminado, financiado por el Banco Mundial y que “ahora debemos interesar a las empresas a ofrecer este seguro”.
Sin embargo señaló que “no están en condiciones de brindar esa cobertura a un cultivo que todavía está susceptible al ataque de plagas como el picudo, que es controlable”.
“Este es un desafío que tenemos que enfrentar juntos provincia y Nación. Cuando demostremos solidez en el control de esta plaga, las empresas de seguros van a estar interesadas en ingresar a este mercado”, planteó Rossi.