Bajo el título “Carne Argentina: las restricciones comerciales no sirven”, la Asociación Argentina de Productores en Siembra Directa (Aapresid) se sumó a las voces que cuestionaron esta semana la decisión del Gobierno nacional de extender hasta fines de 2023 los límites para las exportaciones de carne vacuna.
“Desde hace más de 30 años, basándonos en el sistema de siembra directa, bregamos por el cuidado del suelo y la sustentabilidad de los sistemas agropecuarios. En este recorrido, siempre hemos abogado por la libertad de producir y comerciar, sin cambios, ni trabas. Es con reglas de juego claras que se alienta la inversión y se puede planificar a largo plazo”, subrayó Aapresid.
Mirá también Lo que (no) dejó el cepo a la carne en 2021: costó U$S 800 millones
Y continuó: “La ganadería es una parte fundamental en los sistemas mixtos que buscan la sustentabilidad, por lo que sin una ganadería fuerte difícilmente logremos tener los sistemas productivos que tanto queremos y que el mundo moderno nos exige”.
No a las intervenciones
Por eso afirmó que, así como en otras ocasiones estuvo en desacuerdo con las cuotificaciones y restricciones a las exportaciones de granos, en esta oportunidad, considera necesario advertir que las intervenciones en el mercado cárnico atentan contra la transparencia y la igualdad de oportunidades.
Mirá también “Vamos al peor de los mundos”: desde Córdoba critican el nuevo cepo a la carne
“Las medidas intervencionistas no sirven, terminan afectando a los dos eslabones más débiles de la cadena productiva: a los productores, que terminan recibiendo un menor precio por su producción, y a los consumidores, que en el corto plazo y por una reducción de la oferta, terminan pagando un precio más alto por los productos que compran”, enfatizó la Asociación.
