Hasta el momento, las entidades meteorológicas globales no indican con certeza un cambio en la tendencia climática, luego del invierno. Es decir, se mantenían las evidencias de un año Niño “inactivo”, con precipitaciones promedio.
La Oficina de Meteorología australiana, organismo oficial del gobierno de ese país, que revisa cada quince días las principales variaciones del clima, proyecta los primeros indicios del regreso de “La Niña” a partir de la primavera en el Hemisferio Sur.
“El Niño-Oscilación del Sur (ENOS) permanece neutral con la mayoría de los indicadores oceánicos y atmosféricos dentro del rango neutral”, introducen pero, agregan que, “la mayoría de las perspectivas de los modelos climáticos indican que es probable que el Pacífico tropical central se enfríe en los próximos meses, con tres de los siete modelos analizados por la Oficina que indican que este enfriamiento será suficiente para alcanzar los umbrales de La Niña en primavera”, aseguran. Por su parte, los cuatro modelos restantes se mantendrán neutrales.
En este sentido, cabe recordar que la entidad australiana mantiene el evento negativo del dipolo del océano Índico (IOD) que, según el análisis del Servicio Meteorológico Nacional, esto implica una disminución de las precipitaciones en la cuenca del Plata: el litoral de Argentina, Uruguay y sur de Brasil.